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Esta semana, los Duques de Cambridge se han volcado con los militares destinados fuera del Reino Unido. Si el martes organizaron una fiesta de Navidad en el Palacio de Kensington conn las familias de los soldados desplazados, este miércoles la pareja real se ha desplazado hasta Chipre para visitar al personal que la Real Fuerza Aérea Británica (RAF) tiene en Acrotiri, uno de los destacamentos que el Reino unido tiene en la antigua colonia inglesa. Los Duques aterrizaron en la base aérea para agradecer de primera mano y mostrar su reconocimiento a este grupo de hombres y familias que pasarán las Navidades lejos de sus casas y familias. 

El príncipe Guillermo y Catherine han sido recibidos, a pie de pista, por autoridades de la base militar en un viaje exprés de un día, en el que también se han reunido con la colonia británica que vive junto a los militares

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Esta visita a la isla del Mediterráneo se produce unas horas después de la espectacular gala que la Reina convocó en el Palacio de Buckingham en honor del cuerpo diplomático. Una cita de lo más solemne en el que vimos a la Duquesa de Cambridge absolutamente deslumbrante con la tiara favorita de Diana de Gales y un fabuloso vestido de Jenny Packham. También acudió la Duquesa de Cornualles, con la tiara Greville y la Reina Isabel. En esta ocasión, la mujer de Guillermo de Inlgaterra se ha decantado por una chaqueta en verde oliva, unos pantalones negros y zapatos y cartera a juego

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Los Duques tuvieron la oportunidad de charlar y conocer a los militares enviado a Chipre. Catherine dijo: 'No solo agradecemos que hayan venido, sino también los sacrifcios que realizan a diario en nombre de la nación'. Durante su visita, los Duques repartieron los regalos que las familias les habían entregado, un día antes, para que los entregasen a los militares 

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En Acrotiri se encuentra la Unidad de Soporte de Operación de Chipre, que brinda apoyo a las Fuerzas Británicas de Chipre y las operación en la región para proteger los intereses estratégicos del Reino Unido. La Duquesa estuvo hablando con miembros del escuadrón que tienen su base en la isla para combatir al Estado Islámico

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En su recorrido por la base aérea, los Duques de Cambridge tuvieron oportunidad de conocer las historias vitales de algunos soldados. Tina Hays, que tiene un hijo de 12 años le dijo a Catherine: 'He estado en el ejército durante 15 años y he tenido varis misiones en el extranjero. Pero creo que cuanto más mayores se hacen los hijo es peor. Es muy difícil estar lejos en Navidad', dijo en declaraciones recogidas por la versión inglesa de ¡HOLA!

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Otros militares como el cabo Karl Noakes, de 33 años, dijo que había recibido las fotos de su hija Alysia, de dos años, en la fiesta de Navidad de este martes en Kensington. 'Es difícil. He estado lejos muchas veces y nunca es fácil, pero ahora es muy diferente. Mi hija pregunta por mí cuando hablamos', dijo este mando que no regresará a casa hasta febrero. Al igual que otros muchos de sus compañeros elogió a los Duques por la organización de la fiesta de Navidad para sus familias: 'Significó mucho para todos nosotros'

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Durante las próximas fiesta habrá 11.000 marineros, soldados de infantería y pilotos de aviación desplegados. Los Duques de Cambridge contaron a los militares cómo se desarrolló la fiesta en el Palacio de Kensington en la que se comieron muchos chocolates y los niños pudieron hacer diversas manualidades. Ya desde un atril y de manera más formal, el hijo del príncipe Carlos elogió la labor de las Fuerzas Armadas. 'Gracias por vuestro compromiso y  sacrificios. Estamos en deuda con vosotros y Catherine y yo nos sentimos muy afortunados de poder estar hoy aquí'

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Tras su visita a la instalación militar, los Duques de Cambridge se dieron un baño de multitudes con las personas y los niños que viven allí

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