¡Dos auténticos granjeros! Las sorprendentes imágenes del voluntariado de Máxima y Guillermo de los Países Bajos
Los Reyes han hecho labores de jardinería y limpieza en una granja
El día del voluntariado
Más allá de los actos institucionales a los que acuden, esta semana los Reyes de los Países Bajos han dejado de un lado el protocolo para convertirse en dos granjeros. Han asumido este nuevo rol con la finalidad de aportar su granito de arena en el NLdoet, día nacional del voluntariado impulsado por decimoctava vez por la Orange Fund, fundación que ellos mismos presiden. El telón de fondo de la jornada ha sido la finca Op Aarde en Brielle, municipio fortificado de la Holanda Meridional que ocupa la antigua isla Voorne. Rodeados de otros voluntarios y trabajadores habituales de esta granja, Máxima y Guillermo de los Países Bajos han protagonizado unas insólitas imágenes en las que se le puede ver trabajando en el campo, con animales y ayudando a personas dependientes.
Una simpática anfitriona
A su llegada, al monarca y su esposa, que el 2 de febrero cumplían veinte años de matrimonio, les explicaron el funcionamiento de la granja para poder ponerse cuanto antes manos a la obra. Además, fueron recibidos por un habitante muy especial, una perrita llamada Ella que no dejaba de menear el rabo ante sus dos invitados reales, un gesto con el que demostraba lo contenta que estaba con la visita. "Vamos", le decía el Rey mientras la acariciaba primero para después hacerlo la Reina. Guillermo y Máxima de los Países Bajos se deshicieron en atenciones con el perro puesto que ambos son grandes amantes de los animales. En el palacio de Huis ten Bosch, su residencia de La Haya, tienen tres mascotas llamadas Skipper, Nala y Mambo, con los que posaron en la última felicitación navideña.
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¡Puesta a punto para el verano!
Con sudadera blanca, pantalones cómodos y zapatillas, una de las actividades que hizo Máxima de los Países Bajos fue lijar un banco del jardín para que los habitantes de la granja puedan usarlo ahora que quedan pocos días para la llegada de la primavera. Según Blauw Bloed, mientras trataba la madera para eliminar los efectos del agua y el frío le comentaba a dos personas que le acompañaban que está deseando que llegue el bien tiempo. Los Reyes y sus tres hijas suelen dar la bienvenida al verano con un posado familiar en los jardines de su residencia
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¡Un verdadero jardinero!
La granja Op Aarde posee una gran extensión de finca en la que hay árboles que podar, y precisamente de esa tarea se encargó el rey Guillermo Alejandro. Con unas tijeras de poda en la mano y protegido con guantes, estuvo poniendo a punto unos perales junto a otras personas que hacían lo propio con otros árboles cercanos. Para el monarca, que lleva casi nueve años en el trono, el trabajo de los voluntarios es vital para el funcionamiento del país. "Holanda no puede prescindir de voluntarios, Holanda se paralizará sin voluntarios. Lo vimos el jueves pasado en Harskamp", dijo haciendo referencia a su visita a Harskamp, donde reciben a refugiados de la guerra de Ucrania.
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Un día en el establo
El establo es uno de los lugares centrales de esta granja multifuncional en la que producen alimentos y los venden, por eso la Reina dedicó gran una parte de la visita a a limpiar la zona dedicada a las cabras y las ovejas. Con un gran rastrillo en la mano, acompañada de otros voluntarios y con una entusiasta sonrisa, Máxima de los Países Bajos, de 50 años, se puso unas botas de agua verdes y unos guantes para conocer cómo es el funcionamiento de la cuadra y participar en sus actividades de mantenimiento.
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Trabajo en equipo
Con un gran rastrillo en la mano, Máxima de los Países Bajos se encargó de coger poco a poco montones de paja que había esparcida por el suelo. Esta actividad la compartió con dos mujeres, cuyo esfuerzo resaltó públicamente. "Ha sido bastante intenso y las mujeres han hecho la mayor parte, ¿no es así?”, indicaba una vez finalizada la jornada, cuando atendió a los medios junto a su esposo.
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La destacada labor de los ancianos
Guillermo de los Países Bajos poniendo a punto unas sillas blancas mientras charla con una señora mayor. Dentro de esta granja viven personas mayores con demencia temprana que hacen actividades. De esta manera mantienen su independencia y ayudan a que la finca funcione cuidando de los animales, manteniendo la huerta, colaborando en en la cocina...
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Voluntariado simultáneo
En uno de los establos vemos a la Reina en plena acción junto a uno de los 25 voluntarios que ayuda en esta granja. Máxima de los Países Bajos se esforzó en coger la paja amontonada para trasladarla con su rastrillo, que sujetaba con fuerza con su mano izquierda. Esta finca, sin embargo, no fue el único lugar que recibió ayuda sino que en la misma jornada se abrieron más de 5.000 lugares de todo el país para que la gente se pudiera familiarizar con el voluntariado
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La fuerza de la Reina
Ya recogido el establo, la reina Máxima demostró estar muy en forma y tener mucha fuerza al mover un enorme carro de madera lleno de paja. La esposa del monarca de los Países Bajos sumó su esfuerzo al de otra mujer. A la madre de las princesas Amalia, Alexia y Arianne le gusta mucho cuidarse y considera que el deporte es un desafío. Además, practica diferentes disciplinas para mantenerse saludable. Mientras que los Reyes estaban en la granja, la princesa Beatriz estaba ayudando en un zoológico situado en Bilthoven
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La reflexión del Rey
"Lo bueno del voluntariado es que a menudo tienes a varias personas juntas que no lo hacen todos los días, pero que están dirigidas por personas que saben cómo hacerlo. Es divertido hacer cosas juntos que no haces todos los días", aseguraba el Rey, al que vemos con una gran maceta en brazos para colocarla en un salón que tiene un enorme ventanal por el que entra luz natural.