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Fueron muchos los ciudadanos que acudieron a los alrededores de la iglesia de la localidad belga de Bonlez y no dejaron de vitorear sus nombres y felicitarles por el dían tan especial que estaban viviendo. Una de las más aclamadas fue la reina Fabiola, que una vez más demostró el buen estado de salud del que disfruta a sus 82 años. Para la ocasión, la esposa del fallecido rey Balduino, que llegó al templo acompañada por los reyes Paola y Alberto, apostó por un primaveral look en el combinó varias prendas en colores marfil y frambuesa

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Tampoco pasaron desapercibidos los príncipes Felipe y Matilde, que acudieron al oficio junto a su hijo Emmanuel, quien a sus cinco años protagonizó algunas de las instantáneas más divertidas del día. Al igual que la reina Fabiola, Matilde también apostó por una de las tendencias de la temporada y lució una chaqueta amarillo flúor combinada con una falda blanca y complementos de color marrón
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La princesa Astrid, que lució un original traje en varias tonalidades de rosa, acudió acompañada por sus hijos Joaquín y Leticia María, y su marido, el príncipe Lorenzo
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Si hace unos días veíamos a la Familia Real española al completo asistiendo a la Primera Comunión de Miguel, tercer hijo de los Duques de Palma, en esta ocasión ha sido la princesa Louise de Bélgica la que ha protagonizado esta celebración tan señalada y ha disfrutado con sus padres, los príncipes Laurent y Claire, de uno de los días más importantes de su vida
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Nicolás y Aymeric, hermanos pequeños de la protagonista del día, llegaron a la parroquia Sainte-Catherine de la localidad belga de Bonlez acompañados por su madre, la princesa Claire
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La princesa Louis, que lució un sencillo vestido rosa pastel que combinó con una diadema, chaqueta y bailarinas del mismo color, acudió a la iglesia de Bonlez muy feliz y sonriente aunque algo sorprendida por la multitud que quiso acompañarla en este momento tan especial
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La pequeña disfrutó del oficio religioso y escuchó los cantos del coro junto a todos sus compañeros de clase
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A pesar de que hace unos meses saltaron los rumores de que el príncipe Laurent iba a dejar de estar invitado a las actividades oficiales de la Casa Real, la comunión de su hija era una ocasión única y muy especial que no podía perderse y todo apunta a que con su asistencia pretende desmentir las informaciones de las que se hicieron eco algunos medios belgas
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