1/12 © Rocío Lumbreras. Foto: Álvaro Medina, de Chachachaphoto

Hay novias que son bastante indecisas y no saben bien qué tipo de vestido llevarán en su boda. Luego hay otras, como Rocío Lumbreras, que tienen las cosas muy claras. "Me apasionan todos los diseños de Cortana. Su sencillez, su fluidez en las telas… tienen un sello especial, para mí era una apuesta segura. No fui a ningún otro sitio, ni vi a ningún diseñador más. No es necesario complicarse cuando tienes la idea tan clara", nos explica cuando el preguntamos por qué eligió esta firma.

2/12 © Rocío Lumbreras. Foto: Álvaro Medina, de Chachachaphoto

Si algo caracteriza el diseño que esta gallega –afincada en Madrid desde hace más de 15 años– eligió para su gran día es su sencillez. Se trata de un vestido de novia que podríamos englobar dentro de una de las grandes tendencias del momento: el minimalismo. ¿Las peculiaridades del diseño? Varias, su tejido satinado y su aspecto vintage. Un tono que llevó a Rocío a prescindir de cualquier otro color en su look nupcial.

3/12 © Rocío Lumbreras. Foto: Álvaro Medina, de Chachachaphoto

"Lo curioso es que cuando llegue a Cortana me probé varios modelos y este fue el primero de todos ellos. Me parecía increíble haber encontrado tan rápido lo que buscaba. Mis amigas no se lo podían creer, para muchas novias es impensable que el primero vestido que se prueben en un único sitio sea el definitivo. En mi caso, así fue. No le hice cambios al vestido en sí –formaba parte de las prendas de la colección de la firma nupcial–, simplemente añadí los mitones, que era un toque muy distinto y original y además un sello muy Cortana. Además de un velo a juego, de tul de seda ambos", explica.

4/12 © Rocío Lumbreras. Foto: Álvaro Medina, de Chachachaphoto

La gallega nos explica que su melena es uno de sus puntos fuertes. "Mi potencial es el pelo o eso me dice mi madre siempre. Soy pelirroja y siempre he tenido una melena larga, además suelo llevar el pelo suelto, es más mi estilo, por eso no dude en llevarlo suelto. Y siempre tuve claro que quería llevar velo, me parece un accesorio que te hace sentir muy novia y siempre había soñado con ponerme uno".

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También cumplió con algunas tradiciones, como llevar algo nuevo, regalado y prestado. "Asimismo, lleve un pequeño lazo azul en el ramo con una medalla muy especial colgada". Hablando de ramos, el suyo, creado por Florearte, estaba compuesto por ramas largas de Limonium y astilbe de diferentes colores en tonos empolvados. Una composición que encajaba a la perfección con su vestido.

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Rocío llegó a Madrid como muchos estudiantes, con la intención de labrarse su futuro. Ella cursó periodismo y comunicación audiovisual, pero su espíritu emprendedor hizo que hace 4 años fundara Drestip – un buscador de moda y belleza con más de 500 marcas– junto a su socia, Patricia de Juan, que fue también quien le presentó a Joaquín. "Mi socia es marbellí y fue ella quien me invitó a pasar unos días y quien me presentó a Joaquín –que es sevillano– que lo conocía de sus veranos. A pesar de conocernos en Marbella y pasar muchos años sin saber nada el uno del otro, nos reencontramos a los seis años en Londres. Él vivía allí, trabajando como arquitecto, y yo viajaba con amigas, y fue entonces cuando empezamos a salir. Hemos estado en una relación a distancia cinco años".

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Después de cuatro años viviendo separados por varios cientos de kilómetros decidieron dar el paso. "Siempre había soñado con encontrar a la persona con la que compartir mi vida y casarme con ella para siempre. Desde que empezamos a salir supe que era él, siempre supe que era él. Además, me he imaginado vestida de novia desde que era muy pequeña", nos cuenta Rocío.

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Se dieron el 'sí, quiero' en su tierra, Galicia. "La iglesia fue el monasterio de Poio (Sanjenjo, Pontevedra), donde se casaron mis padres y tiene un entorno precioso. Después lo celebramos entre viñas, en un sitio llamado Lagar de Pintos, que está situado en un enclave espectacular. Un valle con las viñas casi en plena vendimia con todos los matices de colores de las hojas.

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Para organizar todos los detalles del gran día contaron con mucha ayuda. "La numero 1 fue mi madre, sin ninguna duda, quien también optó por llevar un vestido de Cortana. Conté la wedding planner, Montana eventos, que es maravillosa, y me acompañó prácticamente hasta el final el día de la boda. Además, mi suegra que es una gran artista me ayudo muchísimo con todo el sitting y meseros, todos pintados a mano por ella, eran de ciudades del mundo en las que habíamos estado Joaquín y yo de viaje. Ella tiene una empresa que se llama Pinta Porcelana y que todo lo que hacen es perfecto para una boda".

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"En la cena, cada invitado podía encontrar el menú y también una tarjeta de Drestip con un código de descuento especial para todos los invitados que era ROCIOYJOAQUIN".

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Cuando le preguntamos a Rocío qué fue lo más especial de aquel día, no lo duda. "La entrada a la iglesia con mi padre, jamás la olvidare. Cuando estábamos caminando empezando a caminar me dijo unas palabras muy bonitas".

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"Fue increíblemente especial llegar al altar y ver la cara de Joaquín, estaba nervioso y feliz. También recuerdo nuestra entrada por debajo de las Viñas con los gaiteros y un día espectacular de sol en Galicia y con mucho verde. El momento ramo fue el más divertido y especial también, se lo di a mi hermana", explica.

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