Sin tiara pero deslumbrante, doña Letizia sorprende con un vestido de bordados metalizados
La Reina ha estrenado una firma argentino-española, dejando de lado el protocolo, en la cena de gala ofrecida al emir de Catar
Para esta cena de gala con motivo de la visita del emir de Catar, la Reina ha estrenado un diseño de escote barco y mangas largas acampanadas, bordado al completo con hilos metalizados que esbozan un motivo de brocado floral.
Es una creación de Gabriel Lage, un diseñador argentino-español, de padre gallego, que reside en Buenos Aires. Con esta elección, reitera nuevamente su interés por llevar marcas nuevas que apuesten por la producción artesanal.
A pesar de la majestuosidad de este traje metalizado de alta costura, lo realmente rompedor ha sido su decisión de no llevar ninguna de las tiaras del joyero real. En su lugar, ha llevado únicamente un par nuevo de pendientes de diamantes en forma de flor y su confiable anillo circular, de Karen Hallam.
La jequesa Jawaher Bint Hamad Bin Suhaim Al Thani también optó por una ruptura de los códigos tradicionales al descartar su abaya por un look roquero firmado por Louis Vuitton.
La pieza principal del look es una chaqueta torera de piel con incrustaciones de cuentas, cristales y pedrería, sacada de la colección Crucero 2020 de la marca. Como es lógico, ha sustituido los pantalones deportivos por una larga falda negra para adaptarla a la gala.
En 2011, ocurrió la última visita de un emir de Catar a España. Todavía como Princesa de Asturias, doña Letizia tampoco llevó tiara en aquella oportunidad y lució un sencillo vestido peplos en azul marino.