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En lo que se refiere al galardón más codiciado del mundo del cine, Penélope Cruz sostiene unos cuantos récords. No solo ostenta el título de la actriz española que más veces ha pisado la alfombra roja de los Oscar sino que a su vez es la que ha estado nominada en más ocasiones, (cuatro concretsmente), y se consagró en 2011 como la única que ha conseguido una de las preciadas estatuillas. Junto con su marido Javier Bardem, que también figuró en la lista de favoritos de 2022 por su papel en Being The Ricardos, la intérprete de Madres Pararelas se superó con una nueva nominación. Una vez más, lo hizo como 'chica Almodóvar', pero en la categoría de mejor actriz, razón por la cual la vimos pasearse en la edición número 94. Imposible olvidar sus espectaculares looks de alfombra roja, tan majestuosos como sus propios trabajos: ejemplares vintage, faldas de princesa, un escote talismán y trajes hechos a medida para ella. 

 

El vestido más interesante

Para la edición de 2022, lució un look más relajado y contemporáneo. Un diseño negro satinado fue esta elección tan separada de los estilismos anteriores. Y es que, aunque la silueta podría parecer clásica, ciertos detalles hacían muy especial a esta creación de la casa Chanel. El cuello de paillettes con forma de pajarita, la abetura en el escote halter, el cuerpo abotonado o los bolsillos, por citar algunos ejemplos, recordaban al esmoquin masculino.

Los vestidazos de alfombra roja que Penélope Cruz ha paseado por el mundo

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Un lookazo de Chanel que copian las centennials

Para la edición de 2020, escogió un vestido negro de cuello halter (poco habitual en su vestidor) con bolsillos y una falda armada de bajo asimétrico. Se trataba de una pieza de aires vintage que reinterpreta un diseño de la colección Primavera/verano 1995 de la casa francesa y ha servido de inspiración para la cantante Dua Lipa, demostrando la influencia de la actriz en otras generaciones.

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El regreso de una diosa griega a la alfombra de los Oscars

Antes de esa última ceremonia presencial prepandémica, Penélope llevaba 6 años sin acudir a estos galardones. Fue en 2014 cuando entregó junto con Robert de Niro el premio al mejor guion adaptado. Para la ocasión, siete meses después de dar a luz a su hija Luna, se decantó por un diseño especialmente favorecedor de corte imperio en color rosa pastel con banda y lazo bajo el pecho en negro. Gusta especialmente su etérea inspiración helénica bajo el sello de Giambattista Valli Alta Costura, que conjuntó con joyas de Chopard: unos pendientes tipo chandelier de platino con un motivo floral realizado con diamantes talla pera y talla brillante; un brazalete de platino y diamantes talla fancy y una sortija con un diamante talla pera de 7 quilates montada en oro blanco.

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Un vestido de princesa destinado para ella

En la ceremonia de los Oscar de 2012, Penélope Cruz cautivó a todos los presentes con un elegante vestido princesa en color azul pastel de escote Bardot. Se trata de una creación hecha a medida para ella de la línea de Alta Costura del diseñador italiano Giorgio Armani. Al igual que en años sucesivos, contó con Chopard para deslumbrar pendientes, una gargantilla y brazalete de diamantes. 

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Un atrevido (y acertado) diseño para una madre primeriza

Un mes después de dar a luz a su primer hijo, Leo, la intérprete reaparecía de la mano de Javier Bardem en la alfombra roja de los Oscar 2011 con un innovador vestido ceñido de color burdeos, una silueta inesperada para una nueva mamá, con bordados de lentejuelas a tono a modo de llamaradas, firmado por la casa L'Wren Scott como parte de su colección Primavera/Verano 2011. Lo acompañó con calzado de Jimmy Choo y joyas minimalistas de Chopard.

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Se despidió de su escote predilecto

En 2010, Penélope estaba nominada como Mejor Actriz de Reparto por su papel en el musical dramático Nine, marcó un antes y un después en su carrera al ser la última gala hasta la fecha en la que ha lucido su hasta entonces escote-talismán. Para ello, escogió un vestido en satén duquesa con cuerpo drapeado y falda de sirena, de la línea Couture de Donna Karan, que conjuntó con joyas de Chopard. En cuanto al escote, nos referimos al clásico palabra de honor, un símbolo del Hollywood dorado que solía ser su favorito. Hasta en 5 ocasiones previas a esta edición lo había llevado a los Premios de la Academia.

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El histórico diseño de su gran triunfo

En 2009, Penélope Cruz se convirtió en la primera actriz española que se hacía con la ansiada estatuilla, un hito obtenido en la categoría de Mejor Actriz de Reparto por su papel en Vicky Cristina Barcelona, de Woody Allen, donde también compartió cámara con su galardonado marido. Esta velada especial ameritaba un traje a la altura, y así fue: lució un vestido vintage de Pierre Balmain que, años atrás, la actriz había visto en el escaparate de la tienda Lily et Cie. Fue un auténtico flechazo y supo que tenía que llevarlo aquella noche.

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Una elección atemporal y 'muy Pé'

En la ceremonia de 2008, Penélope Cruz se decantó por uno de los colores con los que se siente más favorecida, el negro, que sigue formando parte de la mayoría de sus looks de gala hasta el día de hoy, casi 15 años más tarde. Esta es una creación con escote palabra de honor, diseño estratégico con drapeado envolvente, cuyo fin es disimular imperfecciones y resaltar sus curvas, rematado con detalles de plumas. Lo firmaba Chanel Alta Costura, marca de la que ahora es embajadora. Lo acompañó de joyas con rubíes de Chopard.

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Una apuesta de impacto para celebrar su primera nominación

En 2007, Penélope Cruz acudía por primera vez a los Oscar como nominada. Lo hizo en la categoría de Mejor Actriz Protagonista por su interpretación en Volver, de Pedro Almodóvar. Para la ocasión, llevó un vestido de Versace que, al parecer, fue una elección improvisada tras romperse la cremallera de su vestido de John Galliano, por entonces director creativo de Dior, poco antes de acudir a la alfombra roja. Podemos decir que todo pasa por una razón, ya que la española maravilló a la crítica con su diseño de corsé envolvente con amplísima falda de plumas en color rosa palo, un lookazo digno de una estrella en ascenso. 

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Su guiño a Marilyn Monroe

Penélope Cruz recreó uno de los icónicos looks de Marilyn Monroe en la alfombra roja de los Oscar de 2005 con un vestido palabra de honor y lazada en la espalda que la actriz de Los caballeros las prefieren rubias había popularizado en su versión fuscia, cortesía del diseñador de vestuario Billy Travilla. La de la española es una creación casi idéntica, pero de color amarillo, de Oscar de la Renta, que interpreta este histórico momento del cine y de la moda.

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Su look más romántico y sobrio

Esta podría ser su elección más sobria hasta la fecha, al tratarse de un vestido confeccionado al completo en encaje negro, quizá con alusión a las mantillas tradicionales españolas, que lució para la ceremonia de 2001. El traje también llevaba bordados de cristal a lo largo del diseño, por lo que optó por prescindir de complementos vistosos y recurrió a un sencillo recogido bajo con suaves ondas, de inspiración renacentista. El autor del diseño es Ralph Lauren, encargado de vestirla en sus primeras galas.

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El diseño eléctrico que viralizó "¡Pedro!"

En 2000, era segunda vez que pisaba la alfombra roja de los Oscar, y vaya si sería una para recordar durante años. Penélope Cruz llevó un vestido palabra de honor en azul eléctrico y chal a juego, de Ralph Lauren, que pasaría a la historia por razones insospechadas. Fue la encargada de entregar sobre el escenario junto a Antonio Banderas el galardón a Pedro Almodóvar en la categoría de Mejor Película de Habla No Inglesa por Todo sobre mi madre. Una tarea que, como bien sabemos, cerró con broche de oro al grito de "¡Pedro!".

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