
A pocos días del comienzo de las rebajas es posible que ya tengas unas wishlist mental (o física) con algunos caprichos que actualizarán tu armario. Para no arrepentirte de ninguna compra, lo mejor es apostar por prendas prácticas. Esto no quiere decir que tengan que ser básicas o aburridas sino que se trate de propuestas que vayamos a utilizar con frecuencia, a ser posible que respete la regla de los 30 usos, que apunta al número de veces que deberíamos llevar una prenda para evitar que su compra no sea rentable. En este sentido los vestidos mini pueden ser una de las inversiones más versátiles ya que, eligiendo la creación adecuada, podrás llevarlos de un look de trabajo a una cena con amigas. En la imagen, la italiana Valentina Ferragni con un vestido camisero de Etro.

Vestido camisero con estampado de flores y detalle de cinturón, de Zara (39,95 euros).

Mangas abullonadas
Las mangas de farol o abullonadas son el recurso más fácil con el que romper la rectitud y sobriedad de una prenda. Si buscas un vestido corto pero no quieres enseñar los brazos, este tipo de creaciones pueden ser tus aliadas. Además, lograrás proporcionar un aire actual a tu look. Una propuesta que sienta especialmente bien a chicas con silueta triángulo, con la zona de los hombros más estrecha que la de las caderas.

En rosa satinado, con fruncido en el vestido y las mangas, que están ligeramente abullonadas. De &Other Stories (89 euros).

De escote cruzado
El vestido de escote cruzado o wrap dress vuelve cada verano con nuevas actualizaciones. Un ejemplo, este diseño color salmón de la modelo Emily Ratajkowski, que además de contar con el el efecto cruzado en la abertura, añade un nudo en la zona de la cadera. Un modelo idóneo si quieres potenciar las curvas de forma natural y que podrás combinar con cualquier tipo de calzado.

Wrap dress en rojo con volantes en el bajo, de Brownie (49,90 euros).

Abertura en pico
Este tipo de aberturas son perfectas para estilizar la silueta ya que potencian la sensación de verticalidad. Además, si el código de vestuario es flexible, pueden funcionar también en un estilismo de trabajo siempre y cuando el escote no sea muy amplio. Un vestido para presumir de bronceado que podrás combinar con alguno de los accesorios del momento: los colgantes de medallón o los collares de cuentas, la nueva obsesión de moda de las influencers.

Vestido con escote en pico y fruncido en la cintura, de Maje (175 euros).

El rey del verano
Hay muchas alternativas al vestido blanco pero esta prenda siempre termina por convencer a las que más saben de moda, sin importar las tendencias del momento. Aunque el vestido blanco es perfecto para crear un look de playa, puedes adaptarlo a un ambiente urbano con accesorios de inspiración working, como un bolso oscuro o unas gafas de sol con montura de pasta. Como calzado, elige la comodidad de unas alpargatas o sandalias de tacón bajo. En la imagen, la alemana Caroline Daur con un modelo de Philosophy.

De lino, con cierre de botones, mangas abullonadas y cinturón, de Uterqüe (119 euros).