
Con el verano a pocas semanas de lejanía los escaparates, las tiendas y los estilismos de muchas personas a pie de calle comienzan a anunciar las primeras tendencias de los meses venideros. Pero aunque el cambio de estación suele traer consigo un mejor clima, lo cierto es que hay algunas prendas que deberían permanecer en el fondo de armario. Entre ellas, las chaquetas de transición. Pero no cualquier modelo, sino opciones fáciles de llevar que te permitan aportar un aire actual a tus conjuntos y se confirmen como una propuesta de entretiempo para lucir hasta (casi) la llegada del otoño.
Vaquera actualizada
Da un nuevo aire a tus conjuntos más básicos apostando por cazadoras con un diseño más especial. No hace falta sucumbir a novedades imposibles ni siluetas complicadas, basta con sustituir la clásica chaqueta denim por modelos que jueguen con el color o añadan algún que otro detalle de tendencia, como el patchwork, el estampado tie dye o el contraste de tonalidades. En la imagen, la influencer Belén Hostalet con un diseño colorido de House Of Harlow 1960.

Chaqueta vaquera con adornos de patchwork a lo largo de la pieza, de Loewe (790 euros).

Americana de lino
La blazer de primavera -una prenda muy presente en el armario de las expertas en moda más influyentes- te ayudará a resolver tus dudas de estilo cuando no sepas qué ponerte y además te permitirá adaptar tus estilismos a las temperaturas cambiantes. Elige un modelo confeccionado en materiales ligeros como el lino, el algodón o la seda si buscas un modelo satinado y de tonalidades pastel, crema o blanco. Podrás llevarla tanto con vaqueros como con vestido o falda y, si te atreves, incluso con mallas de ciclista, uno de los binomios de la primavera.

Americana oversize de lino con cuello de solapas y cierre de botones, de H&M (39,99 euros).

Cárdigan de algodón
Si tienes entre tus básicos de invierno una chaqueta tipo cárdigan de algodón puedes mantenerla durante el cambio de armario siempre y cuando no sea demasiado gruesa (por ejemplo, propuestas de lana). Para adaptar este tipo de prendas a los conjuntos de primavera y verano, basta con combinarla con vestidos cortos o shorts vaqueros o, por otro lado, llevar la chaqueta sobre diseños de largo maxi y aire boho. Una opción perfecta para culminar looks urbanos o estilismos perfectos para esas noches de playa de los primeros días de verano.

Chaqueta de punto confeccionada en algodón y con doble bolsillo frontal, de Brownie (49,90 euros).

Camisa corta
A medio camino entre las chaquetas de punto y las sobrecamisas encontramos la camisa de manga corta y silueta clásica. Una alternativa más ligera que las chaquetas punto y muy fácil de combinar. Estilistas y prescriptoras la llevan sobre tops o camisetas sin manga para acertar en las semanas de entretiempo sin dejar a un lado la estética primaveral.

Camisa de manga corta de lino, de &Other Stories (49 euros).

Gabardina fluida
Marcas como Zara, con su segunda colección SRPLS, han apostado por las gabardinas fluidas como parte de sus propuestas de cara a verano. Lo bueno de estas prendas es que no resultan tan cálidas como una americana pero ayudan a hacer frente al viento o la lluvia suave en esos días en que el tiempo no acompaña. Además, resultan más formales que la cazadora vaquera tradicional por lo que podrás incluirla en tu look de trabajo incluso si cuentas con un código de vestuario más exigente.

Gabardina fluida en color verde militar, de Bershka (35,99 euros).

Chubasquero
Las prescriptoras de estilo escandinavas, acostumbradas a la lluvia más que las españolas, han recuperado esta temporada el chubasquero de inspiración ochentera. Se trata de una tendencia que convencerá sobre todo a las amantes de las mezclas poco convencionales, la estética deportiva y las prendas funcionales. En la imagen, la estilista Emili Sindlev con un diseño de Ganni en color verde oliva con nudo en la espalda y escote circular.

Cazadora tipo chubasquero con cuello subido y bolsillos delanteros de solapa. De Zara (29,95 euros).

Función de sobrecamisa
Esta temporada abundan las sobrecamisas de tejido vaquera para llevar sobre camisetas o tops más veraniegos. Se trata de una opción muy práctica con la que además podrás renovar tu vestuario tantas veces como quiera jugando con las prendas superiores. Una alternativa similar la puedes encontrar con maxi camisas de corte masculino que, aunque estén confeccionadas en materiales más livianos, pueden funcionar como chaqueta de entretiempo. Así lo demuestra el look de la influencer Matilda Djerf, donde la camisa blanca con mangas recogidas se convierte en un complemento más del look.

Camisa clásica con estampado de rayas verticales, de Uterqüe (69 euros).