Con las mujeres que forman parte de su vida como referente, parecía inevitable que a Aroa Luyk también le picase el gusanillo por el mundo de la moda. Su abuela es Paquita Torres, coronada como Miss España en 1966, con tan solo 18 años, y finalista después de Miss Universo. Su madre es la modelo Estefanía Luyk, que debutó en la pasarela madrileña a los 14. Parece que la pasión por esta industria es algo que en esta familia siempre han tenido claro desde una edad temprana.
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"Ha salido mitad a su padre, mitad a mí: es responsable como él y físicamente es más yo", admite Estefanía Luyk a ¡HOLA! cuando habla de Aroa, la mayor de los dos hijos que tiene con el empresario José Luis Díez de Baldeón. Acaba de cumplir este 1 de noviembre 19 años y lo hace queriendo seguir la estela familiar: se mudó a Madrid para estudiar Gestión y Comunicación de Moda en UDIT y ha sido precisamente en la capital donde la hemos visto acudir a citas como Mercedes-Benz Fashion Week Madrid.
Aroa ha hecho sus pinitos como modelo, posando además en dos ocasiones junto a su madre para esta cabecera. "Me encanta posar con mi madre, porque es como una amiga y nos pasamos el día riendo. Hablamos de cualquier cosa y eso hace que todo sea más divertido y ameno", asegura.
Pero también siente curiosidad por el mundo de la organización de eventos, algo a lo que también se dedica Estefanía, quien montó su propia agencia. Mientras Aroa se encuentra centrada en sus estudios, de momento mantiene un perfil muy discreto en redes sociales, donde apenas publica contenido.
Tal vez por ello mismo sus apariciones públicas generen tanta expectación. Y es que es llamativo el gran parecido entre Aroa y su madre, que va más allá de compartir rasgos físicos: "Desde que era pequeña, me ha atraído la moda y me encantaba contemplar cómo mi madre elegía sus vestidos para los eventos. Por ello, y por pura vocación, me fui adentrando en este mundo", cuenta a ¡HOLA!
Como ocurre con muchas de nosotras, a menudo, es su propia madre uno de sus referentes a la hora de vestir. Que el estilo se hereda es algo que queda claro cuando las vemos juntas, a veces incluso coordinando sus looks. Ambas parecen confiar en clásicos elegantes que solucionan cualquier conjunto, como unos pantalones de traje negro y camisas lisas.
Pero tampoco dudan en lucir vestidazos de fiesta cuando la ocasión acompaña. Incluso hemos visto a abuela, hija y nieta coincidir con total black looks, cada una aportando su toque personal, pero con la misma gracia que viene dada con la genética. "He crecido en una casa donde la moda estaba siempre muy presente, por mi abuela y mi madre, mi vocación fue surgiendo poco a poco", explica Aroa.
La nieta del exjugador de baloncesto estadounidense Clifford Luyk, admite que a menudo toma prestada ropa de su madre, con incursiones recurrentes a su armario, que Estefanía se toma con humor: "Medio armario mío está en el suyo. Que yo recuerde, siempre me ha quitado ropa", confiesa a ¡HOLA! Algo que la propia Aroa admite: "Tengo vídeos probándome sus zapatos con tacones altísimos cuando era pequeña. Recuerdo que me colaba en su habitación y empezaba a ponerme sus abrigos y joyas".