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Es una de las modelos más cotizadas del momento. Sus ojazos azules, su atlética silueta y una forma de posar que atraviesa la cámara han llevado a la top escocesa Rebecca Donaldson a lo más alto de la moda. Un mundo que siempre le ha apasionado y que la adora con la misma reciprocidad. Y es que, tras esa espectacular apariencia, Rebecca guarda lo mejor: una mujer tenaz, valiente y auténtica, con sólidos valores y una lucidísima mente. La perfección existe.
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-Eres mundialmente conocida como modelo y fundadora de una marca de ropa deportiva. ¿Qué te llevó a combinar estas dos facetas?
-La industria de la moda siempre me ha fascinado y, al terminar la escuela, estudié una licenciatura en Marcas de Moda Internacionales. La combinación de mi experiencia como modelo con mi formación académica fue el paso natural hacia el lanzamiento de mi propia marca.
-Cuenta la leyenda que fue tu madre quien vio claramente tu potencial para el modelaje, ¿es cierto?
-Efectivamente, ella me inscribió en un concurso de modelos, que gané. Uno de los jueces era una maquilladora que me propuso hacer unas sesiones de prueba con ella. Y esas imágenes llamaron la atención a una agencia de modelos que me contrató. Así empezó todo.
-¿Ser una top model ha sido como esperabas, o tenías una idea un tanto idealizada de tu profesión?
-Un poco ambas cosas. Por un lado, es una industria difícil que exige mucho compromiso y trabajo duro. Tenía una visión idealizada -más glamurosa- de lo que es en realidad. Lo que la gente no ve es todo el esfuerzo y la dedicación que requiere.
-¿Qué te resulta más complicado de tu profesión?
-Sin duda, viajar. Puede ser muy solitario… Te mudas constantemente de un país a otro, trabajas con gente nueva durante periodos cortos… Construir relaciones significativas es todo un reto, cuando siempre estás en movimiento.
-¿Y la parte más gratificante?
-Ver el producto terminado, siempre es una sensación increíble. Hace que todo valga la pena.
“La moda es una industria difícil que exige mucho compromiso y trabajo duro. Tenía una visión idealizada -más glamurosa- de lo que es en realidad. Lo que la gente no ve es todo el esfuerzo y la dedicación que requiere”
-Si no hubieras sido modelo, ¿dónde y cómo estarías hoy?
-Seguiría en la industria de la moda, quizás dedicándome al estilismo. Disfruté mucho de esa faceta y de estar detrás de las cámaras. Sin embargo, mi deseo de viajar fue lo que finalmente me llevó a centrarme en el modelaje.
-Tu estilo marca tendencia allá donde vas. ¿Cómo lo definirías?
-Como una mezcla de elementos femeninos y masculinos. Me encanta el equilibrio entre prendas fuertes y estructuradas, con tacones. Ese aire relajado y natural me encanta.
-¿Cuáles son los pilares de tu vida?
-Sin duda, mis amigos y mi familia. No hay nada más reconfortante que volver a casa con la gente que realmente me conoce. Me mantienen con los pies en la tierra y me recuerdan lo que realmente importa.
-¿Qué es lo que más admiras en las personas?
-La amabilidad y la disciplina. Creo que los pequeños actos de bondad pueden tener un gran impacto en el día a día de los demás. En cuanto a la disciplina, admiro a las personas que se mantienen comprometidas con sus metas, incluso ante la adversidad. Esa dedicación me inspira y me motiva.
-¿Qué te llena de felicidad?
-Estar con mis seres queridos, relajada y entre risas, me hace muy feliz. Hace poco me convertí en tía, por primera vez, y ver a mi sobrina disfrutar de sus primeros momentos de vida, y la alegría que sienten mi hermana y mis padres es muy especial.
-Ser escocesa te da carácter, pero ¿qué define realmente a Rebecca Donaldson?
-Me encanta que exista el estereotipo de que ser escocés te da carácter; la verdad es que lo creo. Siempre estamos animados y transmitimos energía positiva allá donde vamos. Pero lo que me define realmente son los valores con los que crecí, ser consciente de mis raíces y de dónde vengo.
“Los pilares de mi vida son mis amigos y mi familia. No hay nada como volver a casa con la gente que realmente me conoce. Me mantienen con los pies en la tierra y me recuerdan lo que realmente importa”
-Cindy Crawford, Claudia Schiffer, Christy Turlington... las grandes tops de los noventa vuelven a sorprender al mundo. ¿Te ves con una carrera tan larga como la de ellas?
-Espero seguir trabajando a cualquier edad. Además, en el futuro, me encantaría tener hijos y dedicarme a criarlos. Si puedo compaginar eso con mi carrera, sería ideal.
-Conoces bien España, ¿qué destacarías de nuestro país?
-La gente y la comida. Los españoles me recuerdan mucho a los escoceses. Si no fuera por la barrera del idioma, creo que ambos países se llevarían de maravilla. La energía española siempre es muy positiva y acogedora. Y, por supuesto, la gastronomía es increíble: en España se come bien, sin importar dónde estés.
-¿Qué opinas de la moda española?
-Tiene un estilo relajado combinando tradición clásica y modernidad. Hay marcas increíbles que me encantan. Sin duda, tiene una fuerte presencia en el sector.
-¿Qué consejo le darías a alguien que empieza en moda?
-¡Redes, redes y redes! Puede ser difícil entrar en esta industria, pero si te esfuerzas y te centras en conectar, será más llevadero. Cuanta más gente conozcas, y con más personas colabores, más fácil será encontrar las oportunidades y llegar a dónde quieres.