Vinilos que cuentan una historia
No te limites a un elemento decorativo. Está en tu mano también encontrar creatividades que enternezcan, que añadan vida a las paredes de tu hijo y que le hagan una compañía muy especial aportando historias, emociones y movimiento. Puedes aprovechar zonas muy concretas de su dormitorio para incluirlos, no solo grandes paredes diáfanas. En este ejemplo que te presentamos vemos una perfecta interacción de un monito bebé con el espacio de unas repisas, que se agarra a una liana, se mece y salta.
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Ilusiones ópticas al servicio de la imaginación
Si algo tienen de mágico los vinilos es que pueden volverse reales con poco que sepamos añadirle imaginación a su dibujo. Que un árbol sirva de soporte al marco de un espejo real es un tipo de magia que puedes obrar y crear con ella esa nota de originalidad y diversión que convierta una pared cualquiera en una continuación a un reino de fantasía.
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Mamá, la cama me sonríe
Como padres, podemos volver divertida y atrayente la realidad más mundana para educar a nuestros hijos en la creatividad, la imaginación y la seguridad en ellos mismos. ¿Cómo no va a creer un niño que todo es posible si su cama tiene ojos y le da las buenas noches cada vez que se va a dormir? Este ejemplo de vinilo funciona muy bien: una cama con estructura de cabaña ya es de por sí un elemento que volvería loco a cualquier niño; pero si además una de sus caras es el rostro feliz de la cama, estamos convirtiendo todas sus noches en un guiño cómplice para su descanso.
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En las nubes
Esta es la decoración perfecta para aquellos niños que sueñan despiertos y que consideran que están en las nubes: un vinilo de gran formato que convierte la pared en un cielo estrellado. Te recomendamos que, como en este ejemplo de decoración, busques colores discretos que no saturen la percepción cromática la habitación y que además, en la medida de tus posibilidades, los demás muebles busquen cierta consonancia de color. Si no, en vez inspirar la imaginación del niño, puede acabar por colapsarle.
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Juego de ramas
Sin duda, uno de los clásicos cuando se trata de vinilos para dormitorios infantiles es todo lo que tiene que ver con árboles y ramajes. Son juegos de diseño gráfico muy fáciles y evocadores. A veces menos es más, y no hace falta incorporar un gran trono en el medio de la habitación, sino que con unas cuantas ramas con pajaritos podemos conseguir un efecto muy agradable, decorativo y muy amigable.
Contra el miedo al aseo
Muchas veces los niños más pequeños tienen fobias a ciertas zonas de la casa, porque les resultan frías, ajenas o demasiado adultas. El aseo es una de esas partes de la casa que más reservas crea entre los más pequeños. Primero, porque suelen tener un gran espejo, y los niños generalmente suelen pasar por una fase en la que aquello que muestra el espejo les inquieta. Por otro lado, el aseo es una zona con sanitarios que hacen ruidos ensordecedores, y una fobia común en los niños es que el water les absorbe. Para hacer este entorno más amigable, traspasar la barrera de dedicar los vinilos solo a su habitación y hacerlos extensibles al aseo puede ser una gran solución.
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Menos es más
Este ejemplo de decoración es una gran idea feliz. El vinilo puede ser sencillo, apenas dos peces y un suelo con flora marina. Pero el conjunto general es un verdadero éxito, la lámpara parece integrada dentro del conjunto y el armario parece parte de este decoración. La habitación en conjunto se transforma en una pecera o en un fondo marino, es cálida, divertida y muy imaginativa, y el vinilo no sobrecarga ni satura el espacio.
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Todos los libros que nunca leeré
Jugar a que los espacios del dormitorio son otra cosa puede ser muy divertido. Existen vinilos que transforman una pared en el cuadro de mandos de una nave espacial y, en este caso, en una imponente biblioteca de dibujos animados. Cualquier idea es bien recibida y puede acabar produciendo tu en tu hijo la sensación de profundidad, fantasía y juego. ¿Cuántas tardes creando aventuras puede pasar imaginando que al levantar un libro la pared se mueve?
Climb every mountain
No pongas límite a tu propia imaginación: imagina cualquier cosa y anima a tu hijo a trabajar en el propio diseño de su habitación para crear un entorno único e inimitable. Una habitación que está a los pies de una colina. Lluvia sobre la litera. Una ventana desde la cama. Concedido. Todo sueño es realizable cuando se trata de vinilos.
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La excepción que confirma la regla
Es muy vintage medir a tu hijo usando una esquina de la casa e ir añadiendo muescas con rotulador, pero tal vez resulta más limpio y divertido utilizar un vinilo con forma de gran regla. Además, puedes moverlo a distintas partes de la casa, y añadir fotografías del niño.