1. Personalidad y estilo
El dormitorio de matrimonio ideal es aquel que se adapta a las necesidades de los dos, para que ambos os sintáis bien. Tiene que ser reflejo de tu estilo, pero haciendo alguna concesión a los gustos de tu pareja, para que reine siempre la armonía. Diseña una atmósfera neutral y pon una nota de color en las telas. Y, por supuesto, coloca una ropa de cama a la altura de las circunstancias, como esta funda nórdica de raso de Nacional Sedera (nacionalsedera.com), que te abrazará mientras dormís.
2. Una cama '10' para dormir a pierna suelta
Capaz de ofrecerte un descanso reparador. Por eso, si tus metros lo permiten, elige un colchón ‘Super King’ (200 x 200 cm), que facilita el descanso en pareja, o al menos, uno de 150 cm. La cama Vividus de Hästens (hastens.com) presume de ser la más increíble: hecha a mano con 210 kilos de materiales naturales, permite personalizarla para que esté a la medida de tus sueños. Eso sí, llevar a cabo un ritual de descanso también contribuye a crear el clima idóneo para dormir toda la noche. Apaga el móvil, no te acuestes recién cenada y sigue siempre el mismo horario, incluso en la noche de San Valentín.
3. Sitio para tus cosas
Seamos sinceras, aunque has intentado seguir los sabios consejos de Marie Kondo y otras muchas gurús del orden, el maquillaje, los bolsos, los accesorios y las agendas que regalan con las revistas siempre terminan en el dormitorio. Por ello, necesitas disponer de piezas con capacidad que te permitan guardar todo, hasta que tengas tiempo de hacer revisión y tirar muchas de ellas. Esta cómoda de Ikea (ikea.com) es un buena opción, ya que sus cajones tienen mucho fondo y altura y en la parte superior puedes colocar objetos de tocador y complementos de uso diario.
4. Un coqueto rincón de lectura
Con una buena butaca, donde leer un libro, disfrutar de una siesta de 15 minutos o contemplar la lluvia y dejarse llevar por el momento. A la hora de elegir el asiento idóneo, piensa que debe ser proporcionado con el espacio disponible y con el resto de muebles y que, además de parecer cómoda, debe serlo. Si quieres dar una pincelada de atrevimiento al espacio, elige una tela en un color o un motivo impactante, como en esta propuesta de The French Bedroom (frenchbedroomcompany.co.uk).
5. Plantas para que te sientas libre
Además de por su capacidad sanadora y su poder transformador, las plantas ayudan a crear espacios más libres y llenos de calidez. Por eso, no debe haber habitación ni estancia de la casa que les prohíba la entrada. Eso sí, en el dormitorio lo más conveniente es elegir tonos y variedades que inviten al descanso y nos ayuden a dormir mejor, como el aloe vera, la hiedra o la lavanda. Propuesta de H & M Home (hm.com).
6. Espacio para bailar
Porque el dormitorio ideal debe ser espacioso y amplio, para que puedas no solo moverte con comodidad sino también realizar tu gimnasia diaria, llevar a cabo tus minutos de meditación o practicar el baile de moda, si quieres darlo todo en la boda de tu mejor amiga. Por ello, no recargues el espacio de muebles y objetos, busca piezas que te faciliten el día a día y opta por una distribución a medida. Esta propuesta de Lago (lago.it) puede ser un buen ejemplo a imitar. Incluso las molduras del techo son una buena idea.
7. Una chispa bohemia
Que saque a relucir tu alma hippie y tu espíritu joven, demostrando que el tiempo no ha hecho mella en tus ideales. Para crear esa atmósfera coloca plantas en lugares estratégicos, recurre a tejidos naturales, que favorecen el descanso y haz la cama ‘capa sobre capa’, es decir, con varios recubrimientos (plaids, sábanas, fundas…) a la vista, que arrastren y den sensación de personalidad, sin caer en el desorden. No olvides los cojines y almohadones. Propuesta de Smithers of Stamford (smithersofstamford.com).
8. Zona de escritorio
Tanto para las que se llevan el trabajo a casa como para las que ‘viven’ en la habitación, es una necesidad contar con un escritorio. Además, los expertos lo tienen claro: el dormitorio de hoy es el salón y la oficina del siglo XXI. Por eso, aunque desde la cama puedes contestar correos, dar vueltas al tema de una reunión o establecer la agenda del día siguiente, contar con una buena mesa y silla de oficina te ayudarán a hacerlo más cómodamente y sin dolor de espalda. Eso sí, elígelos según tu estilo, como estos de portobellostreet.es. Lo bueno de trabajar en casa es que puedes elegir el mobiliario y la decoración que más te guste.
9. Mucho romanticismo
Porque el romanticismo no es una moda pasajera ni siquiera producto de un día, aunque ese día sea San Valentín, ríndete a su encanto. Para imprimir esa atmósfera, nada mejor que la gama cromática de los blancos y beiges y, si tu pareja no se siente fuera de lugar, alguna pincelada rosa (uno de los pilares de este estilo), como en este dormitorio de Laura Ashley (lauraashley.es).
10. Un vestidor a tu medida
Y, en el caso de dormitorios compartidos, de la de los dos. Piénsalo bien: cuando estás buscando casa para mudarte una de las cosas en las que te fijas es en el número de armarios que tiene. Por eso, el dormitorio ideal debe disponer de uno o dos, para que vuestra ropa esté ordenada, a mano y a la vista. Debe adaptarse a vuestras necesidades e incorporar aquellos elementos y accesorios que os ayudan a mantener el orden. Propuesta de Rauch Möbelwerke (rauchmoebel.de).
11. Una buena iluminación
Potencia la luz natural y la artificial. Abre las ventanas y deja que los rayos de sol iluminen la estancia y cuando llegue la noche, enciende la lámpara que necesitas. Para ello, apuesta por una iluminación que combine luz general y puntual, para crear ambiente y coloca puntos de luz en cada una de las zonas: en el cabecero, lámparas de sobremesa, flexos o apliques, según tengas o no costumbre de leer en la cama, y en los armarios, focos Led empotrados. La Mariée de Linea Light Group (linealight.com) proporciona un bello escenario, lleno de reflejos y efectos.
12. Una bañera junto a la cama
Porque darte un relajante baño y saltar (casi literalmente) de la bañera a la cama es un auténtico placer y un privilegio al alcance de pocos. Los dormitorios con el baño integrado (una tendencia en alza) poseen el encanto de las suites de los hoteles de lujo, con la ventaja de estar rodeado de tus cosas y no tener que abandonar la habitación antes de las 12. La ropa de cama Osaka de La Mallorquina (lamallorquina.es) es el acompañante ideal, ya que sus azules nos trasladan directamente a la playa y el mar.