Camas para niños que son auténticas cabañas
Si echas la vista atrás, seguro que cuando eras pequeña soñabas con tener tu propia casita dentro de tu habitación para jugar, vivir aventuras y, por qué no, también para dormir.
La cabaña más moderna
Una cama tan creativa como tu hijo, con un diseño moderno, que respeta el concepto clásico de cabaña. No sabrá por dónde subir a ella cuando esté inmerso en sus juegos, si por sus originales escaleras o por sus amplias ventanas. ¿Has visto la abertura del techo? Perfecta para contemplar las constelaciones de estrellas cuando se acueste al llegar la noche.
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Mitad cabaña, mitad cama
Esta cama modular será el centro de la habitación de los más pequeños Puedes colocar la cabaña sobre la cama a la hora de dormir y utilizarla de manera separada para jugar el resto del día. Vosotros decidís. Además, puedes convertirla en una cama-cabaña de mayor altura cuando crezcan, y aprovechar el espacio que queda libre abajo.
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Una cabaña única
La estética de esta cama es una auténtica delicia. Al ser una cama baja, pueden acceder a la cabaña para jugar con toda facilidad y así imaginar mil aventuras. Y cuando llegue la hora de dormir, el original tejado forrado en algodón, les servirá de refugio.
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Una casita dentro del dormitorio
Aunque la mayoría de las camas que juegan a parecerse a una cabaña son literas, hay ejemplos como este, que pese a ser una cama de una altura considerable es realmente para una sola persona. Mantiene dos ventanas hacia el exterior y está construída en madera.
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La gran casa del árbol que siempre soñamos
Esta cama es una litera con escaleras, que hace referencia a las típicas cabañas en un árbol de Estados Unidos. La cama de abajo permanece fuera y la de arriba dentro, con un diseño de tablas que parece improvisado y realizado como las casas sobre un árbol, con una arquitectura infantil y desenfadada, pero manteniendo un estilo muy atractivo gracias también a su color blanco-madera, muy sobrio y elegante.
Litera útil, abierta y con esencia de cabaña
Esta casa tiene los mínimos aderezos de cabaña y sin embargo consigue un efecto muy envolvente. Es ideal para no causar una sensación de aislamiento demasiado pronunciada, y por tanto puede servir para más edades y conseguir un uso prolongado en el tiempo. Además, abajo mantiene la típica estructura de cajones, por lo que sigue siendo una opción muy útil a la vez que original y estética.
Estilo nórdico para soñar con arces
Con madera maciza, esta cama es una auténtica cabaña para meter dentro de casa. Es individual pero amplia, y dispone de unas cortinas de tela que cierran tanto la puerta como las ventanas. Por sus dimensiones y por estar casi completamente cerrada, es más recomendable en habitaciones amplias, pues en pequeñas puede comerse todo el espacio.
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Un dosel que parece una cabaña
Esta cama con forma de cabaña es muy minimalista, y realmente consiste en un dosel que recrea la silueta en tres dimensiones de una cabaña, incluyendo la chimenea. Es perfecta para una edad superior, no tanto para niños como para adolescentes. Y debajo dispone de dos cajones donde aprovechar el espacio almacenando cosas.
Estructura de madera abierta
Siguiendo con el diseño de cama con dosel, esta cama de madera maciza sigue recreando un mundo imaginario donde la habitación es el bosque y la cama una cabaña, incluyendo en este caso una valla campestre que rodea la cama y que, para los más pequeños, sirve de barrera para que no se caigan por la noche. Este modelo es ideal para habitaciones pequeñas, porque al no tener paredes sigue ofreciendouna buena sensación de amplitud.