El arquitecto e interiorista Nacho García de Vinuesa no es muy aficionado a los árboles de Navidad. Él prefiere 'inventarse uno' con un jarrón de metro y medio que tiene en su casa. Viendo el buen gusto que tiene en su trabajo (en la imagen, un apartamento en Madrid) , es fácil imaginarse lo bien que le queda.
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Son clientes habituales de García de Vinuesa grupos de restauración y hostelería. Uno de sus últimos trabajos es el restaurante Nikkei 225, en Madrid, uno de los locales de moda del momento.
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Para Nacho García Vinuesa siempre hay más garantía de acertar en la decoración navideña utilizando pocos colores. El resultado es más elegante.
