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A pesar de su protagonismo durante los años sesenta, el delineador blanco se ha convertido en uno de los grandes olvidados cosméticos. Durante aquella década, se aplicaba para destacar los diversos volúmenes de la mirada y crear equilibrio entre los tonos coloridos y los oscuros, algo que las grandes firmas han ido recuperando durante las últimas temporadas. Así, el eyeliner blanco regresa con fuerza para encajar en el marco de las tendencias multibeneficios, pues se revela como el gran aliado para que la mirada parezca más grande, alegre y despiertaVictoria Beckham, por ejemplo, lo utiliza para camuflar las ojeras.

En cualquier caso, has de tener en cuenta que, al contrario que el lápiz negro, el blanco sirve para poner de relieve las zonas donde se aplica: lejos de disimularlas, las destaca y aumenta, mientras capta la atención. Por eso acentuará la necesidad de utilizar antes un primer que prepare los párpados (aquí encontrarás nuestras recomendaciones).

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Para lograr un golpe de efecto

En su desfile de alta costura 2022, Christian Dior demostró que el delineado blanco puede crear todo un look, sin precisar más compañía. Fue aplicado en el párpado inferior en forma de banana: siguiendo el sentido inverso que si se ubicara el párpado superior, pero logrando mucha más luz y un efecto refrescante. Para un resultado perfecto, recoge el pelo hacia atrás creando un acabado húmedo, como el que luce esta modelo.

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Para gamas multicolor

Una de las virtudes del blanco es su habilidad para hacer destacar otros colores: en este caso, el rosa. Al aplicarlo en los dos extremos del ojo, el maquillaje del desfile de alta costura de Celia Kritharioti adquiría un aspecto tridimensional, y se apreciaban mejor la máscara de pestañas y la sombra rosa, que hubieran pasado inadvertidas sin el toque níveo. Finalmente, se ha utilizado sombra blanca para sellar y pronunciar el trabajo del eyeliner de ese mismo tono. Sería como un countouring para la mirada, creado a la inversa.

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Crear un espacio en blanco

Como decíamos, el blanco resalta las zonas donde se aplica, y esta imagen representa un buen ejemplo. Gracias a la introducción de este tono, las líneas negras parecen más espaciadas, y por tanto, crea el efecto de unos ojos más abiertos. Elegante y sorprendente; estas serían las claves del delineado arty con más personalidad según Christian Dior. 

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Radiante y sofisticada

Como el delineado negro clásico puede llegar a resultar muy apagado, te recomendamos a dibujar otro trazo en paralelo sobre el párpado fijo, en color blanco y desde el centro del ojo. Además, con este truco obtendrás una mirada más rasgada y alegre, conservando un look ultrasofisticado.

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Hágase la luz

Cuando lleves un eyeliner negro grueso, incluye unos trazos níveos aplicados tanto en el párpado superior como en el inferior crearán una mirada más luminosa. Es el método con que se maquillaba Twiggy, la mejor supermodelo de la historia, que será recordada precisamente por su intrigante mirada.

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Reservado a las atrevidas

Siempre se ha dicho que, sin tonos que lo equilibren, un exceso de pigmentos blancos desdibuja la mirada y la hace más pequeña. Y es absolutamente cierto: por eso el ahumado de ojos es tan popular. Por este motivo, te invitamos a maquillar los ojos a la inversa: siguiendo el estilo tradicional, pero sustituyendo el negro por el blanco y pigmentando más el párpado fijo que el móvil. 

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Para rescatar la mirada

Este truco visto en el desfile de Andreas Kronthaler para Vivienne Westwood es tan antiguo como efectivo: los ojos pequeños y hundidos agradecerán un delineado blanco sobre la línea de agua, pues le concede un aspecto más amplio y descansado. En realidad, cuando maquillamos esa zona de negro, enmarcamos bien la mirada, sí, pero hacemos que parezca más pequeña.

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Mirada artística

Horizontal y sobre la cuenca del ojo, un trazo blanco fino y preciso transforma por completo el rostro, creando un look rompedor y minimalista. El resto de la piel ha de mostrarse limpia y cuidada, con un maquillaje sencillo en el que no destaque ninguna otra zona: la mirada toma protagonismo, que se abre por obra del delineado.

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