Guía de belleza: 6 Trucos para conseguir unas cejas perfectas
Resuelve todas tus dudas y descubre las claves para encontrar la forma apropiada, el diseño y el color que mejor te sientan
Resuelve todas tus dudas y descubre los trucos de experto para encontrar la forma apropiada, el diseño y el color que mejor te sientan.
Las cejas tienen una función capital en nuestra imagen, la de definir los rasgos y enmarcar nuestra mirada, de tal manera que un largo adecuado, un ángulo equilibrado y la forma idónea podrá mudar tu aspecto, resaltar tus ojos, suavizar tus facciones y favorecerte sobremanera.
Eso sí, antes de que todo eso suceda tienes que saber qué tipo de ceja favorece a la forma de tu rostro, qué herramientas existen para utilizar a diario, pequeños trucos para rellenarlas o la forma correcta de depilarlas, ¡y para eso estamos nosotros! Vamos a darte 6 consejos y trucos de experto para que consigas definir tus cejas como una auténtica profesional, sacarles partido y embellecer tu mirada al máximo, ¡toma nota!
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DEPÍLATE DE FORMA CORRECTA
¡Ha llegado la hora de dar forma a tus cejas! ¿Dónde empiezan? ¿En qué punto se elevan? Aunque parezca mentira, incluso en términos de belleza todo se resume a pura matemática y geometría. Eso sí, la fórmula es mucho más sencilla de lo que parece. Toma nota:
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Determina el nacimiento de la ceja: Toma como referencia la aleta de la nariz y coloca un lápiz —palito, pincel…— junto a ella, sigue en línea recta por el lagrimal del ojo hasta su nacimiento.
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Marca el arco: Para saber dónde ha de estar el punto de inflexión del arco, coloca ahora el lápiz desde la aleta de la nariz hasta la parte más externa del iris cuando se mira de frente.
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El punto final: A la hora de determinar en qué lugar ha de terminar la ceja, vuelve a color al lápiz en el lateral de la nariz y dirígelo al extremo del ojo. ¡Ya tienes tu ceja perfecta!
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UNAS CEJAS ACORDES CON TU ROSTRO
Por mucho que nos guste el formato que luce alguna celebrity o persona anónima que hayamos visto, no toda forma de cejas nos queda bien ni nos favorece, de hecho, en el caso de elegir una línea inadecuada podríamos cambiar la expresión de nuestro rostro e incluso estropearlo. Por eso, ten en cuenta:
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Si tienes el rostro redondo: lo que has de intentar es equilibrar precisamente la redondez de la cara, por lo que lo ideal es que optes por unas cejas ascendentes con un ángulo marcado —cuanto más arriba llegue el arco, más favorecedora te resultará—.
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Si tienes el rostro ovalado: la forma de tu cara resulta muy versátil, únicamente tendrás que aplicar las tres reglas que te explicamos al comienzo y obtendrás las cejas adecuadas para tu tipo de rostro. ¿En la búsqueda de un acierto seguro? Luces las clásicas cejas marcadas con un arco suave.
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Si tienes el rostro alargado: decántate por unas cejas rectas y horizontales. Si tienes la cara muy afilada, asegúrate de que el final de las mismas se alargue para resaltar los rasgos horizontales, haciendo que la línea de la ceja llegue un poco más allá del final de los ojos.
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Si tienes el rostro cuadrado: para suavizar tus facciones, levantar la mirada y relajar la línea de la mandíbula, lo mejor es optar por unas cejas en triángulo con un arco sutilmente redondeado.
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Si tienes el rostro corazón: evita las cejas gruesas y procura que sean delgadas, cortas y que estén ligeramente redondeadas.
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Si tienes los ojos muy juntos: depila el entrecejo por detrás de la línea que marca el límite para separarlos ópticamente. En el caso contrario, para los ojos muy separados sobrepasa esa línea, generando el efecto opuesto.
EL CEPILLADO
Existen herramientas sencillas que tú misma puedes utilizar a diario en casa antes de salir, que te ayudarán a definir tus cejas y que luzcan un aspecto arreglado. Una de ellas es precisamente el cepillo. Bastará cepillar las cejas una vez al día para que tener a raya a los pelos rebeldes y que su forma se mantenga intacta. En el caso de que el vello sea demasiado reticente a coger forma, puedes pulverizar un poco de laca sobre el peine antes de cepillarlas, de tal manera que puedas solucionar su aspecto desaliñado.
APUESTA POR LA NATURALIDAD
Olvida las tendencias pasajeras, la obsesión por unas cejas híper-perfectas o emular la línea de alguna celebrity en la que te hayas fijado. Cada rostro es un “lienzo” totalmente diferente y has de abogar por la naturalidad y las cejas que mejor se adecúen a tu óvalo facial. Por ejemplo, las cejas marcadas y pobladas se han convertido en todo un boom entre las celebrities, con abanderadas como Cara Delevingne o Taylor Hill, sin embargo, si tienes un rostro pequeño será mejor que optes por cejas más finas y menos densas que cedan todo el protagonismo a tus ojos.
Del mismo modo, te recordamos que no has de estresarte si tus cejas no son perfectamente simétricas, es normal que una pueda tener un arco ligeramente más marcado que la otra.
¿RELLENAR O NO RELLENAR? ÉSA ES LA CUESTIÓN
Si tienes unas cejas despobladas, poco definidas y quieres poder remediarlo a través del maquillaje, puedes optar por diseñar, rellenar y matizar tus cejas con la ayuda de lápices como el Brow Satin de Maybelline, por un lado provisto de un lápiz cremoso que dibuja y da forma a tus cejas; y por otro de una sombra que las rellena y matiza para un acabado más natural. También podrás encontrar otros modelos como el Super Liner Brow Artist, de L’Oréal o el Veluxe Brow Liner, de MAC.
En el caso de que quieras evitar el maquillaje y que la falta de densidad en tus cejas te suponga un problema, existen soluciones semipermanentes como la micropigmentación y el microblanding.
¿DEBO TEÑIRLAS?
¿Te has aclarado el cabello y no sabes si deberías hacerlo también con tus cejas? En principio, el color de tus cejas no tiene por qué ser obligatoriamente el mismo que el de tu pelo, si bien es cierto que resulta más favorecedor si, como máximo, difiere dos tonos con respecto a tu melena. Eso sí, en el caso de que vayas a hacerlo ten en cuenta:
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No te sirvas de cualquier producto, utiliza un tinte específico para las cejas.
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También puedes apostar por remedios naturales, como pueden ser los productos elaborados a base de camomila.
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Existen cremas de decoloración facial que también pueden servirte.