De las 'babylights' rubias al castaño moca: la evolución del cabello de la reina Letizia en 9 etapas
Su melena está siempre en el punto de mira. Y si algo parece evidente si nos fijamos en los últimos looks de la reina Letizia, es que hoy tiene la melena más brillante y sana que nunca, pero también más oscura. A lo largo de los años, hemos podido comprobar cómo ha habido una evolución en el tono del cabello de doña Letizia, que ha pasado de jugar con los matices rubios a un color más intenso y mucho más uniforme, sin esos reflejos que llevó durante mucho tiempo.
Tinte más uniforme
De hecho, en una de sus recientes apariciones, a comienzos de este mes de enero de 2020, podía parecer -por el efecto de la luz- que se había teñido el cabello. “Últimamente, lleva un tinte moca, de un solo tono. Antes llevaba reflejos, un poco más claros, en dos tonos, como unas babylights. Ahora, se le ve un tono uniforme, brillante, a lo Kate Middleton, aunque no tan chocolate”, nos cuenta María Baras, directora creativa de Cheska. “Es un tono café. A la luz del sol son los típicos colores que pueden tener un reflejo dorado, porque al final son en la gama de los marrones oscuros. Se le ve el pelo súper brillante, más denso, más rico, más invernal, que contrasta con la piel. Se puede apreciar sobre todo un paso de los reflejos a un tinte más sólido”, añade María Baras.
Un matiz más intenso
Así, poco a poco ha ido dejando atrás los matices más rubios, como vemos en esta imagen de diciembre de 2019. “Efectivamente, en la actualidad, se ve un castaño medio marrón chocolate que le sienta fenomenal, me encanta. Creo que lo que han hecho es camuflar las mechas que tenía antes con el nuevo tono, de tal manera que esas mechas ahora quedan como un ligero reflejo más claro en el conjunto del cabello, que da la sensación de que llevase unas sunlight muy muy sutiles y suaves”, añade el director de Maison Eduardo Sánchez.
Sus comentadas canas
Hubo un momento en el que, de repente, sus canas se convirtieron en el centro del debate. Llamaba la atención que la Reina mostrara con naturalidad esos cabellos blancos en su melena, como sucedió durante su viaje a Japón y Corea en octubre de 2019. “Un día nos sorprendió a todos dejando a la vista sus canas apostando por la belleza real”, apunta Marina Morán, directora de Naturalmente Spa Per Capelli Reus. Si la reina Letizia se hacía baño de color, hay que tener en cuenta que este 'maquilla' más que cubrir, el 50% de las canas. Pero hay canas más o menos duras y en función de su dureza, actúa más o menos”, nos explica el peluquero Eduardo Sánchez, director de Maison Eduardo Sánchez de Madrid. “Otra opción es que su peluquero le haga reflejos, y en ese caso, como son parciales, no cubren la totalidad de las canas, se realizan en las zonas donde más cabellos blancos hay para intentar cubrirlos, pero siempre quedará una parte a la vista”, nos cuenta.
Matices dorados
Ha habido ocasiones en las que la Reina ha apostado por matices más claros, como en esta ocasión en abril de 2017, con reflejos rubios que aclaraban el conjunto del color de su melena. Tal vez vuelva a probar con estas tonalidades, pero lo cierto es que, por el momento, parece haber encontrado su tono de melena ideal.
Del rubio al castaño
Ha jugado, como podemos ver en esta imagen de noviembre de 2016, con la gama de los castaños, más o menos claros. “De los rubios oscuros pasó a unos castaños más oscuros, cada vez oscurecía más su color (realizados con plantas naturales), pero siempre lucia el cabello con un extra de brillo gracias tratamientos que aporten un extra de fuerza, luminosidad e hidratación", cuenta Marina Morán.
Tonalidades llenas de vida
Lo cierto es que lo que no ha cambiado es la búsqueda de una melena brillante, con vida. Y el color también influye. “Las tonalidades castañas tienden a tener más vitalidad que las rubias, ya que los niveles de decoloración no son tan altos, la acción de decolorar el cabello es uno de los principales motivos por los que surgen las melenas apagadas y deshidratadas, a menos que seamos muy constantes en el cuidado de la misma”, nos cuenta el estilista Isaac Salido. En esta imagen de agosto de 2015 presume de melena castaña.
Mechas marcadas
Ha dejado atrás, al menos por el momento, los reflejos, como los que llevaba en esta imagen de agosto de 2012. “En sus inicios apostaba por mechas rubias y marcadas, bastante más clara que su tono natural. Más tarde cambió el color de su cabello con mechas balayage (tienen un efecto mucho más natural, ya que son trabajadas con pincel a mano alzada para potenciar y dulcificar al mismo tiempo las facciones del rostro)”, cuenta Marina Morán.
Fiel al tono de su base
"Está claro que ha tenido una evolución muy marcada, porque ha ido pasando por diferentes tonos, siempre se ha mantenido dentro de una gama similar de tono de base, que siempre ha sido un marrón un poco avellana con reflejos dorados, o miel, o ligeramente cobres. Son las tonalidades que van bien con sus ojos, pardos y ligeramente verdes y dan más luz a su melena”, concluye Eduardo Sánchez sobre el tono del cabello de la Reina, a la que podemos ver en una imagen de junio de 2016.