Las parejas cruzadas de las series turcas: un amor en el guion y otro en el corazón
Actores y actrices que en la ficción están enamorados de un personaje pero que, en la vida real, mantienen una relación con otro compañero del reparto
Los actores de Love is in the air son una piña, tantas horas de rodaje juntos han hecho que se conviertan en una familia. Es habitual verlos compartiendo fotos con sus seguidores de los rodajes o gastando bromas a otros personajes de la serie. Una muestra del buen rollo que reina en el set de grabación y que se ha convertido en un ingrediente más del éxito de la aclamada ficción.
A Başak Gümülcinelioğlu no se le resiste ninguna disciplina artística: música, arte dramático, pintura... todo lo hace bien. Aunque, finalmente, su camino profesional parece que le ha llevado por el mundo de la interpretación, donde no deja triunfar con exitosos trabajos como su papel de Piril en Love is in the air. La actriz cursó además estudios de música en Londres y Kansas y nunca ha dejado aparcada ni su faceta musical, ni la pictórica.
Cagri tuvo claro desde muy pequeño que lo suyo era la interpretación. De hecho, con solo 10 años ya comenzó a formarse para labrarse un futuro en ese complicado mundo. Aún así, su camino no ha sido fácil y hasta los 21 no debutó en televisión. Aunque, a partir de ese momento, trabajo no le ha faltado y hemos disfrutado de su talento en series como Dulce venganza o Luciérnaga. Pero, sin duda alguna, ha sido su paso por Love is in the air lo que le ha cambiado la vida a nivel profesional y personal.
En España descubrimos a Cihan Ercan y Ceren Taşçı de la mano de Erkenci kus, como los fieles escuderos de Sanem (Demet Özdemir). Dos personajes que, sin buscarlo, formaban uno de los dúos más hilarantes y surrealistas de la pequeña pantalla. Después pudimos ver la química que desprendían como pareja, también cómica, no nos vamos a engañar, en Habitación 309, que, aunque fue grabada antes que el pájaro soñador, en nuestro país se emitó después del éxito obtenido por esta ficción.
A Furkan Palali, de 34 años, lo hemos descubierto en España en series como Mi mentira más dulce o Habitación 309. Ahora acaba de terminar el rodaje de la tercera temporada de Tierra amarga. El actor es amante del deporte, geólogo de profesión y aficionado a la Playstation. Furkan se define como un hombre tranquilo y paciente, aunque reconoce que puede ser muy hiriente si pierde los nervios. Al intérprete le encantan los niños y su mayor deseo en este momento es "ganarle la batalla a la pandemia".