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Helena ha declarado sentirse fea e insegura desfilando sobre una pasarela.
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La bella danesa, que tuvo a Mingus en octubre de 1999, no quiere volver a tener hijos.
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Por el momento, Helena y Norman -en la foto poco después de tener a su hijo Mingus- no se casarán.
De madre peruana y padre danés, Helena Christensen posee una exótica belleza que la llevó durante la década de los 90 a convertirse en una de las top models con mayor gancho. El fallecido modisto italiano Gianni Versace dijo de ella que tenía el cuerpo más bonito de la pasarela, y el diseñador alemán Karl Lagerfeld sentenció que nadie tenía mejores piernas que ella.
Sin embargo, Helena Christensen, de 33 años, ha declarado que abandonar su carrera como maniquí y dedicarse a la de fotógrafa es la mejor decisión que ha tomado en su vida, ya que, según dijo, desfilar influía negativamente en su autoconfianza y estado de ánimo, de tal manera que, incluso, llegaba a sentirse fea. “Yo me siento mejor conmigo misma ahora, porque cuando desfilaba la gente siempre estaba señalando mis imperfecciones y nunca me sentía lo bastante bien”, confesó la modelo danesa. Estos problemas personales sólo cesaron cuando Helena dejó la pasarela.
El adiós profesional a la moda
Estas declaraciones eran de esperar, ya que hace un tiempo Helena afirmó: “La vida real empezará cuando deje de ser modelo”. Una declaración que aventuraba su retirada profesional del mundo de la moda.
Actualmente, sus trabajos como modelo son escasos. Las últimas campañas desde las que ha cautivado con su atractivo son como imagen del perfume Alessandro Dell’Acqua y de la firma de ropa H&M. Sobre la pasarela, su último desfile tuvo lugar durante la celebración en Barcelona de una gala benéfica en apoyo a la Fundación Nelson Mandela. Un acontecimiento que organizó su compañera y amiga Naomi Campbell.
Otras prioridades en la vida
Todo el tiempo libre que tiene tras abandonar su profesión de modelo se lo dedica sobre todo a su familia. Su gran prioridad es su hijo, Mingus. El pequeño, que nació en octubre de 1999, es fruto de su relación con el actor americano Norman Reedus, con quien convive desde hace algunos años.
No quiere cambios en su familia
Profesionalizándose como fotógrafa, la bella danesa tiene muy claro que no quiere cambiar nada de su situación familiar actual. Frente a los rumores que especulaban sobre la posibilidad de que se casase con su actual pareja, Helena declaró que no tiene por qué modificar la feliz relación que tiene con Norman. “Somos muy felices como estamos y no tenemos ninguna razón por la que cambiar las cosas en este momento”.
Igualmente, la pareja no desea de momento ampliar el número de hijos, sobre todo, porque el parto es una experiencia dolorosa que la modelo no quiere volver a sentir. “El alumbramiento de un niño es la experiencia más dolorosa de todas en la vida de una mujer”, confesó. Sin embargo, aclaró que la maternidad es “asombrosa” y que ella está alegre de tener a su pequeño Mingus.
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