Tenemos Halloween a la vuelta de la esquina y pocos son los escaparates de tiendas (incluso decoramos nuestras casas), que no nos lo recuerdan. Esta tradición de origen norteamericano, que está ganando cada vez más popularidad en nuestro país, despierta un gran interés en niños y adultos. Sin embargo, también existen personas que sienten un marcado rechazo hacia esta festividad y las actividades relacionadas con ella.
- Leer: Los mejores destinos de España para pasar miedo en Halloween
Por qué nos gusta tanto pasar miedo
Según la doctora en Psicología y profesora de la Universidad Europea, Sara Liébana, "el miedo es una emoción básica que en su mayoría se percibe como desagradable. Su origen es completamente adaptativo y surge de nuestro instinto innato de supervivencia. Lo experimentamos cuando nos enfrentamos a situaciones percibidas como amenazantes o peligrosas, y esta emoción actúa como un estímulo que nos motiva a emprender acciones para evitar dicha amenaza o peligro". No obstante, hay individuos que disfrutan de una exposición controlada a situaciones que generan miedo.
De ahí que muchas personas disfruten tanto de los libros de miedo o de experiencias que nos pueden hacer pasar un rato terrorífico.
La razón detrás de esta diferencia en la apreciación del entretenimiento de miedo radica en el aprendizaje durante la infancia. “Aquellos que lo disfrutan, de pequeños, han podido aprender de su entorno que esas vivencias eran situaciones estimulantes, de pérdida de control que hacía a uno sentirse bien. Tras exposiciones repetidas a películas de miedo, casas embrujadas y fiestas de Halloween terroríficas esta sensación gratificante se va fortaleciendo. Además, estas situaciones también pueden ser una forma de ponerse a prueba con el objetivo de fortalecerse”, afirma Sara Liébana.
Las emociones intensas o la necesidad de vivir experiencias que generen adrenalina no son preferencias universales, y una misma situación puede evocar emociones completamente opuestas en diferentes personas. “Para algunos, esta sensación puede servir como una forma para desconectar del mundo real y vivir experiencias de fantasía”, apunta la doctora. Otros tiemblan solo con imaginarlo.
- Leer: 21 libros de misterio que te mantendrán en vilo hasta el final
Ojo con pasar demasiado miedo
El miedo no siempre juega a nuestro favor, ya que, en ocasiones, puede volverse desadaptativo y perjudicarnos. De hecho, Liébana recuerda que no hay que forzar a las personas a pasar miedo. Si alguien no disfruta acudiendo a un parque temático, leyendo un libro o viendo una película de terror, hay que aceptar las preferencias para no reforzar este sentimiento de miedo.
En cualquier caso, si estás aquí es porque a ti sí te gusta morderte las uñas mientras estás leyendo o viviendo una experiencia terrorífica. Si es tu caso, anota estos títulos con los que sin duda disfrutarás. Además, te proponemos planes de ocio para un Halloween inolvidable.
- Leer: 30 libros de terror y novela negra para una noche de miedo