Aprovecha al máximo el espacio con zonas distintas
Antes de comenzar, considera cómo te gustaría usar la terraza. Piensa en actividades como comer al aire libre, relajarte, leer, tomar el sol, etc. Esto te ayudará a determinar qué áreas necesitas y cómo distribuir el espacio.
Utiliza muebles, plantas o cañizos para delimitar cada ambiente de manera visual. Por ejemplo, puedes colocar una mesa y sillas para crear un rincón de comedor, una zona de estar con sofás y mesas bajas para relajarte, y una esquina con plantas o una fuente. Eso sí, asegúrate de dejar suficiente espacio entre los diferentes ambientes, que nada obstaculice el paso. Y considera la iluminación tanto durante el día como por la noche. Para actividades nocturnas, incorpora luces suaves y cálidas que creen un ambiente acogedor. Además, puedes agregar velas, faroles o guirnaldas de luces para un toque decorativo como hizo en este caso Brákara Studio.
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