Una mayor calidad de vida
Ya lo hemos hablado con Mariló Montero y ahora lo confirmamos con el especialista en ginecología, los resultados tras someterse a Monalisa cambian la vida de las mujeres: "Las indicaciones en las que ha demostrado tener una clara utilidad y beneficio clínico han sido en el tratamiento de los síntomas del síndrome genitourinario de la menopausia, que se produce por una caída en los niveles de hormonas (estrógenos) y que engloba síntomas como la sequedad vaginal, escozor, prurito, dificultad en las relaciones e incluso sangrado con las mismas". También menciona que en casos de incontinencia urinaria de esfuerzo (leve y moderada), "ha demostrado una clara eficacia, así como en las situaciones de laxitud o relajación vaginal (sensación de distensión de las paredes con pérdida de fricción en las relaciones sexuales, entre otros síntomas)".
Está indicado igualmente para tratar el liquen escleroatrófico, "una enfermedad crónica y degenerativa de la piel de la vulva que conlleva importante sintomatología local con prurito, escozor y que puede dar lugar a la pérdida de la anatomía de la vulva. Así como para el tratamiento de las lesiones producidas por el virus del papiloma humano (condilomas o verrugas cutáneas, lesiones en el cuello del útero)".
Por último y en el caso de la estética genital, "lo empleamos en la realización de labioplastias vulvares y cirugía de reparación del periné con resultados estéticos inmediatos, espectaculares y con una evolución clínica increíble. Son cirugías ambulatorias que, con el empleo de esta tecnología láser de CO2, no tienen complicaciones en los tejidos (hematomas o edemas) y con analgésicos orales suponen un procedimiento cómodo y de una recuperación muy precoz. Se consiguen resultados estéticos inmediatos y con una excelente recuperación clínica".