En noviembre del año pasado, Kim Kardashian anunció que ya no quería publicar imágenes sugerentes en sus redes sociales. Su marido, Kanye West, era una de las razones por las que lo había decidido: "No sé si es por el hecho de que mi marido ha dicho que a veces es demasiado sexy y no se siente cómodo con eso. Le escucho y le entiendo".