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Después de asentar su carrera como comentarista deportivo en El chiringuito de jugones y encontrar el amor en Lidia Torrent –la hija de Elsa Anka y popular por su trabajo en First Dates–, Jaime Astrain puso el mejor broche de oro a su 2019: apareciendo en el anuncio de Porcelanosa, protagonizado por Tamara Falcó y emitido por todas las cadenas de televisión generalistas justo antes de las Campanadas.
Ahora este madrileño –aunque se crió en Almería desde que tenía un año y medio– adelanta sus proyectos de futuro a HOLA.com. También Jaime recuerda otros aspectos de su vida, como sus comienzos en el mundo del fútbol, sus entrenamientos en la cantera del Atlético de Madrid junto a David de Gea o sus aventuras en Bali, donde permaneció dos años.
No has podido despedir el 2019 y arrancar el nuevo año de mejor forma.
La verdad que estoy muy contento por cómo ha acabado y por la repercusión que ha tenido el anuncio. Estoy muy feliz. Me siento un privilegiado por eso y por haber podido pasar las fiestas con la familia y amigos. He recibido mensajes de todos y estoy muy contento de cómo salió. Yo tenía el vídeo anteriormente.
¿Cómo te has visto?
Soy muy crítico conmigo mismo, pero me fío de las críticas y las opiniones de mi círculo. Me dijeron que estuvo bien y divertido. Si ellos están contentos, yo más todavía.
Supongo que es un lujoso despedir el 2019 junto a Tamara Falcó, uno de los personajes del momento.
Totalmente. Ya la conocía, pero tuve el placer de conocerla más en el rodaje. Me parece una persona encantadora y con un sentido del humor brutal. Es muy fácil trabajar con ella. El equipo también era brutal. Lo pasamos muy bien.
Ya la conocías de antes, ¿verdad?
Sí, coincidimos en un evento hace un año. Nos presentaron y fue encantadora. No tuvimos mucho tiempo de hablar en ese momento, pero sabíamos el uno del otro por amigos en común y redes sociales. Ya durante la grabación pudimos conocernos más.
¿Cómo es Tamara en las distancias cortas?
En Masterchef se ha podido ver su cara más humana, más cercana. Siempre está alegre, sonriente y facilitándolo todo. Es una persona muy trabajadora, muy minuciosa y siempre poniendo todas las facilidades. Si había que repetir la escena, lo hacía siempre con buena cara y buen humor. Me parece una persona espectacular. Me han preguntado muchas veces por ella y siempre digo lo mismo: me parece súper inteligente y con muy buen rollo. Es muy fácil trabajar con ella.
Antes de modelo e influencer, fuiste futbolista –militó en las filiales del Villarreal FC, Osasuna y Córdoba CF–. Precisamente ahora se cumplen cinco años del final de tu carrera deportiva.
No me puedo creer que hayan pasado ya cinco años, cómo pasa el tiempo. La verdad es que fue una decisión que tomé sabiendo lo que hacía. El fútbol me dio todo y me crió como persona. Además de ser mi trabajo, me dio la oportunidad de conocer a personas increíbles. Pero llegó un punto en el que necesitaba un cambio y me fui a Bali, donde viví dos años. La experiencia fue espectacular. Ahora llevo dos años y medio en Madrid y ha ido todo súper rápido, súper bien. Profesionalmente, no me ha podido ir mejor.
¿Por qué dejaste el fútbol?
No fue por una lesión, por lo que no tengo esa melancolía. Fue una decisión propia. Después de vivir una etapa desde los ocho años a los veintisiete años, tenía que cerrarla. También cumplí objetivos, como jugar en el Camp Nou con toda mi familia presente. No tenía esas ganas de entrenar y jugar. Aunque amo el fútbol y el deporte, a nivel profesional no me llenaba tanto.
Te formaste en la cantera del Atlético de Madrid, donde supongo que coincidirías con muchas figuras.
Sí, coincidí con David de Gea y Joel Robles, el portero del Betis. También con Álvaro Domínguez y el hermano de Kiko Resurrección, que es el capitán del Atlético de Madrid. Lo bueno del fútbol es conocer a tanta gente y mantener el contacto con todos ellos.
¿Qué recuerdas de esa época junto a David de Gea?
Si no me equivoco, tiene tres años menos que yo. Cuando le subieron al equipo Juvenil, recuerdo que era muy tímido y muy callado. Era como una esponja, con muchas ganas de aprender, escuchar y trabajar. Trataba de absorber todo lo que se le decía y era muy humilde. Lo demás, lo que ha conseguido, llegando a ser portero de la Selección Española, lo puede ver cualquiera. Nunca se puede decir dónde va a llegar un chico de catorce o quince años, pero, con la humildad que tenía y las ganas de aprender y trabajar, tenía mucho, mucho ganado.
En lo profesional te va tan bien como en el plano personal. ¿Qué puedes decir de Lidia Torrent?
Me siento un privilegiado de todo lo que tengo en mi vida. A Lidia la admiro profesionalmente y ahí está el resultado de su trabajo. Como persona, no se queda atrás.
Os apoyaréis los dos trabajando en televisión.
Sí, nos apoyamos mucho y entendemos el trabajo que tenemos cada uno. Nos complementamos perfectamente. Incluso, a veces, le pido consejos ya que lleva más años en esto. Creo que algo bonito vivir algo así con tu pareja y que te pueda ayudar en lo que haces.
Lidia ya contó en HOLA.com que te había presentado a su madre. ¿Qué puedes decir de Elsa Anka?
De Elsa sólo puedo decir cosas buenas. Creo que es una crack y no sólo a nivel profesional. Es una persona súper divertida, súper cercana y con un sentido del humor bestial. Sólo puedo decir cosas buenas.
Ahora eres modelo, influencer y trabajas como comentarista en El chiringuito de Jugones. ¿Cómo se presenta el nuevo año a nivel profesional?
Hay varios proyectos y voy a intentar conseguirlo a muerte. Hay cosas de tele y de moda. No me gusta estar parado y me gusta que mi día sea diferente. Por eso, he elegido la vida que tengo. Lo bueno es que no sé qué va a pasar mañana. Es lo que aprendí en Bali, donde me cambió el chip.
¿Por qué te fuiste allí?
En principio, me fui de vacaciones. Pero, una vez allí, no sé si fue algo espiritual, pero sentí la necesidad de estar, así que volví a España, hice las maletas y regresé a Bali.
¿Qué hiciste en Bali durante dos años?
En principio, fue un poco la aventura, pero empecé a trabajar bastante como modelo. También me ofrecieron jugar al fútbol en Indonesia y Malasia, aunque me hacía más ilusión jugar por hobby con extranjeros y gente local, que seguir jugando a nivel profesional. Intenté transmitir lo que aprendí en mis años de futbolista. Luego ya volví porque se me presentaron oportunidades de trabajo muy buenas en España y era hora de volver.
¿Cuántos idiomas hablas?
Inglés, español y un poco de indonesio. Ahora estoy intentando aprender catalán e italiano.
Además de jugar al fútbol, estudiaste una carrera universitaria.
Sí, Ciencias Físicas del Deporte con Gestión y Marketing Deportivo. Después, fui entrenador y entrené a chiquititos. También hice prácticas durante muy poco tiempo en el Rayo, pero no pude compaginarlo.
¿Qué le pides al 2020?
Suena a tópico, pero, obviamente, salud para todos los míos, familia, pareja y amigos. También trabajo. La verdad es que soy poco de pedir. Profesionalmente, me siento un privilegiado y la verdad es que todo me ha ido demasiado bien. Todo lo que tenga que venir, bienvenido sea, con positividad y muchas ganas.
¿Algún propósito?
Quiero formarme más. Obviamente, abrir horizontes en otros países y aprender nuevos idiomas. Trabajar al máximo a nivel de moda.
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