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En plena cuenta atrás para que concluya la última (y exitosa) edición de Operación Triunfo, los concursantes no dejan de recibir sorpresas. Este sábado tocaba el turno, por fin, de sus familiares, que han protagonizado la visita más especial y emotiva de todas las que se han producido en la Academia. Amaia, Aitana, Alfred, Ana Guerra y Miriam llevaban un tiempo soñando con el momento en el que sus seres queridos entraran por la puerta, y más teniendo en cuenta que el programa vive ya sus últimas horas. Durante estos días han sido varias las ocasiones en las que los triunfitos han hablado de su familia y de cómo anhelaban poder enseñarles la que ha sido su casa a lo largo de estos tres meses. Cuando estaban perdiendo la esperanza, ocurrió. La sorpresa fue mayúscula. De ahí que las lágrimas, las risas y los abrazos se sucedieran durante el emotivo momento. Todo estaba a flor de piel.
Ha sido, sin duda, uno de los reencuentros más esperados, sobre todo por el acercamiento de las familias de Amaia y Alfred, que tras conocerse dejaron claro la buena sintonía que existe entre ellas, algo que agradó a los concursantes. Además de ponerse al día y compartir anécdotas durante la cena de la que disfrutaron, los habitantes de la academia les dedicaron la canción Camina, escrita por ellos y Manu Guix. Los familiares demostraron entonces que se sabían la letra a la perfección. Más tarde, bailaron y cantaron temas como La Bikina, Issues, Lo malo y, cómo no, City of Stars, interpretada por Alfred y Amaia, que dejó a todos con el corazón encogido.
Durante unas horas, los concursantes se olvidaron de la presión propia de la final y se dedicaron a disfrutar de cada segundo de sus seres queridos. Tras la despedida, llena de emoción, los cinco finalistas se quedaron con una permanente sonrisa en sus caras al comprobar que todo estaba bien fuera de la academia. La alegría y felicidad de Ana, Aitana, Amaia, Miriam y Alfred era tal que incluso se atrevieron a bromear sobre la posibilidad de que sus familias tuvieran un grupo de whatsapp en el que intercambiaban impresiones. Los espectadores que en ese momento seguían el encuentro a través del canal 24 horas vía You Tube fueron testigos de la complicidad que existía entre las cinco familias y del orgullo de todas ellas, independientemente del triunfito que se proclame vencedor este lunes.
Lo que emociona a los profesores
Los concursantes afrontan las últimas horas de OT con nerviosismo, nostalgia e ilusión. Pero no son los únicos. También los profesores se han empapado de este sentimiento agridulce. Laura Andrés, la profesora de piano, trata de "disfrutar lo que queda y reír y llorar hasya tener cara de mapache". Eso sí, lo hace con un montón de recuerdos y es por eso por lo que ha querido agradecer al programa los tres "inolvidables" meses que ha pasado ayudando a los triunfitos.
La directora de la academia, Noemí Galera, también vive estas horas con melancolía, sobre todo después de que le regalaran una pulsera personalizada con los nombres de los 16 concursantes. "Cuando la he visto casi lloro", ha asegurado antes de revelar que se presenta una semana "muy emotiva". Por su parte, Manu Guix, se ha retratado con los cinco finalistas en el plató de Operación Triunfo. "Esto es todo amigos. El lunes lo rematamos", ha escrito.
Lágrimas de emoción y una tarta de cumpleaños... alumnos y profes afrontan los últimos días de OT
Será dentro de unas horas cuando los espectadores conozcan al concursante que se convertirá en el ganador de esta edición en una gala que se prevé inolvidable y muy especial. Contará con invitados ilustres de la talla de Raphael, Pablo Alborán, David Bisbal y Rosa, quien se alzó con la victoria en el primer OT de la historia, hace ya 17 años.
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