Es ya una cita tradicional. Todos los años, la Fundación Aladina organiza un mercadillo benéfico navideño que busca recaudar fondos para ayudar a los niños y adolescentes enfermos de cáncer. Este fin de semana se ha inaugurado su séptima edición en la Sede del COAM (Colegio de Arquitectos de Madrid) y entre los primeros en acudir a la cita solidaria hubo varios rostros conocidos que quisieron aportar su granito de arena a la causa y, ya de paso, hacer algunas de sus compras de Navidad.
Cari Lapique y su marido, Carlos Goyanes, aprovecharon la ocasión para disfrutar de una jornada benéfica con sus nietos Pedro y Caritina, hijos de su hija Caritina, y con ellos posaron junto al "árbol de los deseos", que dio el pistoletazo de salida a dos intensos días para recaudar fondos. Carolina Herrera hija fue la encargada de encender las luces del árbol y posó con Paco Arango, presidente de la Fundación Aladina, y Goya Toledo.
Todo lo recaudado en este mercadillo navideño se destinará para la investigación contra el cáncer infantil, una nueva UCI de oncología pediátrica en el Hospital Niño Jesús de Madrid y un nuevo pabellón infantil en el Hospital de Getafe, para que los niños con cáncer no pierdan la sonrisa ni la esperanza.
Conscientes de estos objetivos, fueron varios los rostros conocidos que quisieron acercarse hasta la calle Hortaleza para visitarlo. Además de los ya citados, pudimos ver a la modelo Judit Mascó con su marido, Eduardo Vicente, a la presentadora Jose Toledo, a las cantantes Paloma San Basilio y Amaia Montero, a Nuria March con su hijo y a Jacobo FItz-James, hijo del conde de Siruela, que se llevó a su hija Asela, de dos años y medio.
Como siempre, hubo una gran zona infantil donde los más pequeños de la casa pudieron disfrutar de un montón de talleres y actividades gracias a la generosidad de algunas marcas.
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