Baja el termómetro, ¡nos vamos a la nieve!
Para los que van en busca de pistas de vértigo, los que se estrenan en la nieve o quieren probar nuevas experiencias. En plena temporada invernal lo que importa es hacer deporte y como este año no todos pueden permitirse destinos más exclusivos, te damos pistas de cómo divertirte en las montañas más cercanas.
Las estaciones del grupo Aramón (Cerler, Panticosa y Formigal, en el Pirineo aragonés, y Javalambre y Valdelinares, en el Sistema Ibérico turolense) están a la última en tecnología. Si vas a esquiar a cualquiera de ellas no dejes de bajarte la aplicación Snow & Go para móvil, ya que te permite conocer en tiempo real, entre otras muchas cosas, el estado de la nieve, el parte meteorológico, además de los servicios que ofrece cada estación.
Después del esquí, el snowboard es una de las actividades con mayor número de seguidores. En la imagen, un aficionado en la estación de Astún, en el Pirineo aragonés.
Una de las actividades más curiosas que propone la estación de Baqueira Beret es el trineo en coche de caballos. Este recorrido, sin ruidos, sin cascos, solo con el tintineo de los cascabeles, traslada a los pasajeros a los paisajes siberianos del Doctor Zhivago / © Baqueira Beret.
¿Has pensado alguna vez cómo se sienten los esquimales al viajar en trineo? En el sector Ampriu en Cerler podrás vivir la sensación de montar en un trineo tirado por auténticos huskies y de paso aprender valores como el respeto por la naturaleza y el mundo animal o el compañerismo y la importancia del trabajo en equipo.
Cerler cuenta con una pista cerrada para la práctica del speedriding, una nueva disciplina que nació en los Alpes hace solo unos años, y que consiste en una novedosa combinación de esquí con una minivela. Para su práctica solo se necesita tener un nivel de esquí medio.
Si además de esquiar quieres disfrutar de sensaciones diferentes en Cerler, en el sector Ampriu encontrarás el circuito de motos de nieve. Siete kilómetros de huella pisada para recorrer los mejores rincones de la estación o formar parte de una apasionante salida nocturna con cena incluida.
Boí Taüll es una estación para los que prefieren esquiar solos en sus pistas con desniveles de hasta 750 metros y también para los que lo hacen en familia. Cada esquiador tiene su circuito de acción específico.
Formigal propone un novedoso plan de apres-ski nocturno, que consiste en subir hasta el telesilla de Sallent al entrar la noche, cenar en una trattoría a pie de las pistas de esquí y, al finalizar, descender por una pista iluminada durante 2,5 km en un trineo clásico de madera. Es hora de probar el toboganning.
La estación de esquí de Panticosa es la más familiar del grupo Aramón. Los niños cuentan con una cinta transportadora y una pista verde para que den sus primeros pasos en la nieve. Y además esta temporada se ha creado un programa diario de actividades -manualidades, maquillajes, disfraces, juegos...- y una zona de hamacas donde descansar y dormir la siesta. La estancia en el jardín de nieve no puede ser más entretenida.
La montaña ofrece una nueva perspectiva calzados con estas raquetas de nieve, ya que permiten andar por la nieve con facilidad y por senderos que, sin ellas, estarían vetados. En Boí Taüll estas rutas se pueden hacer tanto por la estación de esquí como por el Parque Nacional de Aigüestortes.
Estación pionera en esquí nocturno, Sierra Nevada ha vuelto a abrir esta temporada su pista El Río para poder esquiar o hacer snowboard a la luz de la luna. Una original actividad en la que se puede participar los sábados de enero y febrero.
La estación aragonesa de Candanchú brinda una original iniciativa, se trata de que el coste del forfait se reducirá en función de los grados centígrados negativos que se registren cada jornada. Es decir, que los esquiadores estarán deseando que bajen las temperaturas, y cuanto más, mejor.