El príncipe de Gales ha tenido un emotivo encuentro con una mujer que ha tocado las fibras más sensibles de su corazón. William se ha reunido con una mujer llamada Rhian Mannings, quien perdió a su hijo más pequeño y a su esposo con solo cinco días de diferencia. Mientras Mannings le contaba al Príncipe su historia, este no pudo evitar conmoverse y romper en llanto. Mannings contó al primero en la línea de sucesión al trono cómo fue que su esposo Paul se quitó la vida en 2012, después de que el hijo de ambos, George, de tan solo un año, falleciera a causa de neumonía.
El príncipe William no pudo evitar sentirse afectado ante la historia familiar de Rhian, quien añadió que hubiera deseado que su esposo se acercada a ella y le contaba cómo se sentía. "Me gustaría sentarlo así y decirle: '¿Por qué no viniste a mí?'. Porque se ha perdido tanta alegría, y habríamos estado bien. Y creo que eso es lo más difícil: habríamos estado bien", dijo.
"Lo siento", respondió William, extendiendo la mano por encima de la mesa para tocar la suya. "Es que es difícil hacer estas preguntas...", indicó con un tono de tristeza.
"No, está bien. Es solo que tienes hijos... Es duro... Y tú mismo has sufrido pérdidas", dijo Rhian mientras el futuro Rey hacía una pausa para recuperar el aliento.
Este no ha sido el primer encuentro de William con la valiente señora Mannings. Ambos se conocieron en 2017 cuando Rhian corrió el Maratón de Londres para la campaña Heads Together. Ahora se han vuelto a ver con motivo del anuncio de William y Kate, quienes han dado a conocer el lanzamiento de una nueva Red Nacional de Prevención del Suicidio para cambiar la forma en que se entiende y previene el suicidio.
"La vida puede darte golpes terribles, pero al hablar de ello, con esperanza, puedes seguir adelante", dijo Rhian, quien fundó su propia organización benéfica de duelo, 2Wish, tras la pérdida de Paul y George en 2012. Charlando con té y pastel en la cocina de Rhian, en Gales, ambos hablaron de los devastadores efectos del suicidio y de cómo ella ha reconstruido su vida con sus otros dos hijos, Hollie, de 17 años, e Isaac, de 16. "Rhian, ¿cómo has logrado criar a tus hijos de forma tan brillante? ¿Cómo han logrado prosperar?", preguntó William.
"Se han convertido en niños y jóvenes increíbles", respondió Rhian. "Miro hacia atrás y todavía no sé cómo sobrevivimos... Todavía me preocupa mucho lo que el futuro nos deparará a nuestra familia. Pero intento ser racional y pensar positivamente. Solo quiero que mis hijos sean felices".
"La mejor manera de prevenir el suicidio es hablar de ello. Hablen pronto, hablen de ello con sus seres queridos, con sus personas de confianza, con sus amigos. Así que gracias por hablar de ello", añadió William.
Antes de partir, William se encontró con el resto de la familia de Rhian; sus hijos Hollie e Isaac, además de la abuela, la señora Chris Jones. Rhian preparó para el príncipe una caja de pasteles galeses para el viaje de regreso, Mientras se marchaba, Rhian se volvió hacia su madre, y en tono bromista le dijo: "¡Se llevó tu Tupperware!".