Zoë Saldaña ha demostrado, una y otra vez, que domina el arte de aparecer en una alfombra roja con la misma elegancia con la que interpreta a sus personajes más icónicos. Esta vez, la actriz sorprendió en la premiere asiática de Avatar: Fire & Ash celebrada en Sanya, China, donde volvió a confirmar su estatus como referente absoluto de la moda internacional gracias a un look firmado por Erdem que parece estar hecho para la ocasión, no sólo por la manera en que lo luce pero por la historia detrás de la confección del mismo.
Detrás de la confección del vestido de Zoe Saldaña
El diseño, una pieza en blanco marfil construida a partir de capas de encaje, transparencias y texturas superpuestas, encapsula la esencia más pura de la marca Erdem, que se caracteriza por ser romántica pero con tintes oscuros, guiños históricos, y una sensibilidad casi poética hacia los tejidos.
Esto no es todo, pues el vestido en sí mismo está hecho a partir de retazos rescatados de colecciones anteriores de la marca, por lo que la pieza funciona también como una referencia directa a la historia y trama del nuevo filme. Además, la prenda incluye cristales oscuros cuidadosamente bordados en el centro de la pieza con los que hace un guiño a la ceniza.
Conocida por su inclinación hacia siluetas que destacan su figura sin perder sofisticación, la actriz crea con este vestido una segunda piel etérea, perfecta para un evento donde el arte, la fantasía y la estética se fusionan para contar una misma historia.
Un vestido que parece contar una historia
La parte superior del diseño —con una estructura tipo corset— remite a la tradición del encaje artesanal, mientras que los paneles verticales dan un efecto alargado que acompaña la forma natural del cuerpo de la actriz. Las aplicaciones en negro, estratégicamente colocadas al centro del torso y faldas, aportan un contraste inesperado que rompe la suavidad del color marfil y agrega dramatismo visual.
Erdem suele trabajar con referencias históricas, y este vestido lo deja ver: cortes delgados, caída ligera, encajes rescatados de un archivo y la inclusión de lazos y tiras que flotan con el movimiento. Todo esto crea un resultado que fusiona a la perfección una estética victoriana y contemporánea. En conjunto, la pieza parece hecha para un personaje de fantasía —lo cual resuena maravillosamente con el universo de Avatar.
Un beauty look natural que permite respirar al vestido
Fiel a su estilo, Zoe apostó por un maquillaje sumamente natural, con piel luminosa, mejillas apenas marcadas y labios luminosos e hidratados en tonos nude. Su cabello, suelto y peinado en mermaid waves, mismas que aportan un aire fresco y casi bohemio que evita que el vestido luzca demasiado rígido. Este equilibrio es uno de los grandes aciertos de su look: deja que la prenda sea protagonista sin abandonar la esencia relajada y elegante que caracteriza a la actriz.








