Una de las grandes noches para el Reino Unido llegó con la presentación del Royal Variety Performance en el prestigioso Royal Albert Hall. Al evento —que tiene como fin recaudar fondos para la Royal Variety Charity— llegaron invitados especiales entre los que no podían faltar los miembros de la familia real. Así, el príncipe William y Kate Middleton se dieron cita en el lugar para vivir una velada llena de entretenimiento y momentos únicos.
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La ocasión ameritaba los mejores looks de parte del príncipe y la princesa, en especial porque se unieron a otros invitados como Jessie J, Tom Fletcher e incluso el oso Paddington. Fue así que Kate Middleton se decantó por un vestido de corte sirena muy sofisticado que no solo robó miradas por su elegancia, sino que también evocó uno de los emblemáticos looks de su suegra.
Así fue el look de Kate Middleton inspirado en Lady Di
La tarde del miércoles, el Royal Albert Hall se vistió de gala para recibir a cada uno de los invitados al evento televisivo. A su entrada, el príncipe William y Kate Middleton acapararon todas las miradas con esta sorpresiva y grata aparición. William lució un tradicional esmoquin negro con acabado aterciopelado, una pieza ya clásica en su armario. Sin embargo, quien realmente se robó la noche fue Kate, quien eligió un vestido y accesorios llenos de significado.
La pieza en cuestión fue un vestido ajustado, de corte sirena y escote al hombro, firmado por Talbot Runhof. La princesa eligió el color verde esmeralda, confirmando que es una tonalidad perfecta para lucir durante el invierno —recordemos que recientemente Melania Trump también se sumó a esta tendencia—. El vestido desató en seguida una ola de comentarios al tratarse de una propuesta claramente inspirada en un look de la princesa Diana.
Fue en 1987 cuando Diana y Carlos asistieron a una cena presidencial en Alemania. En esa ocasión, Diana lució un vestido del mismo corte y silueta —pero en color negro— firmado por Victor Edelstein. En aquel momento, lo complementó con un collar circular de diamantes y una tiara.
Kate, por su parte, complementó su majestuoso vestido con zapatos de Manolo Blahnik. Los aretes que llevó fueron especialmente significativos, pues se trató de los pendientes de diamantes de la reina Isabel, obsequiados a ella como regalo de cumpleaños en 1947. También portó un brazalete de diamantes firmado por Cartier. Finalmente, cerró el look con un clutch de Jenny Packham.