Rihanna continúa demostrando que el embarazo es simplemente otra oportunidad para lucir fashionista y con mucho estilo. La cantante, que se encuentra en la recta final de su tercer embarazo, robó miradas con un look atrevido y urbano que rinde homenaje a la estética Y2K.
En los dosmiles, los track suits con un acabado de terciopelo y firmados por Juicy Couture inundaban la rotación off-duty de las celebridades, ahora esa tendencia del milenio ha regresado con fuerza a las pasarelas y el street style.
El estilo urbano de Rihanna no descansa
Para esta salida casual, la fundadora de Fenty Beauty eligió una baby hoodie en tono rosa chicle, que lleva ligeramente caída sobre los hombros para dejar a la vista su baby bump, una característica insignia de su estilo mom-to-be.
La nacida en Barbados combinó la sudadera con unos jeans de corte bajo y holgado con efecto desgastado, evocando el estilo relajado de la era de Britney Spears, Destiny’s Child y los primeros videoclips de hip hop de los 2000.
© Backgrid/The Grosby GroupEn cuanto a calzado, Rihanna apostó por unas botas de trabajo tipo Timberland, un básico de la rotación Y2K que le dan un toque urbano y desenfadado. Los accesorios son parte fundamental de su atuendo, y la intérprete de Diamonds incluyó gafas de sol futuristas, múltiples collares con perlas y dijes dorados, así como anillos statement que refuerzan ese aire de diva.
© Backgrid/The Grosby GroupEste look nos confirma que Rihanna no sólo ha revolucionado las reglas de estilo del embarazo, sino que las reinterpreta a su manera. Desde que anunció su primer embarazo, la intérprete de Umbrella ha hecho de su baby bump un accesorio más en sus atuendos, luciéndola con transparencias, prendas ajustadas o, como en esta ocasión, con un streetwear nostálgico con el que siempre sorprende.
© Getty ImagesLa fiebre Y2K ha conquistado a diseñadores, celebridades e influencers, y Rihanna demuestra que esta estética puede adaptarse de diferentes formas y con diferentes elementos. Entre la paleta vibrante, los cortes holgados y la mezcla de texturas, su elección evoca una era que se define por ser vanguardista y diferente.
Con este look, Rihanna no solo se suma a la tendencia Y2K, sino que la lleva al siguiente nivel, combinando nostalgia y modernidad en un outfit que celebra la moda, la maternidad y, sobre todo, su ADN auténtico.
