Desde hace algunas horas, uno de los temas más comentados en la industria del entretenimiento es la posible relación entre Pamela Anderson y Liam Neeson, quienes se encuentran de gira promocional por el estreno de The Naked Gun, la nueva cinta en la que comparten créditos y que llegará a las salas en los próximos días.
Hasta el momento, ninguno de los dos ha confirmado una relación, pero varios medios han citado a “fuentes cercanas” que aseguran que la actriz de 58 años y el actor de 73 se estarían dando una nueva oportunidad en el amor, tras varios años de soltería y algunos episodios dolorosos en sus respectivas historias personales.
Lo cierto es que en cada alfombra roja se han mostrado cómplices, cariñosos y divertidos, compartiendo risas, abrazos y hasta algunos besos amistosos. Aunque aún no hay confirmación oficial, hay quienes opinan que hacen una pareja encantadora… y lo que sí es un hecho es que a Pamela se le ha visto más guapa que nunca.
El look más femenino de Pamela Anderson en Nueva York
Su reciente llegada a Nueva York ha sido un verdadero desfile de estilo. Aunque ha lucido varios atuendos memorables, uno en particular ha llamado nuestra atención: un conjunto monocromático en rosa que la hizo ver dulce, sofisticada y absolutamente radiante.
Está claro que Pamela Anderson está en una nueva etapa como referente de estilo. Atrás quedó la imagen de la mujer explosiva de los 90, con atuendos provocadores y curvas como centro de atención. Hoy se presenta como una figura elegante, con propuestas arriesgadas, pero siempre llenas de clase, y con un beauty look natural, sencillo e impecable.
Durante un paseo por las calles de Manhattan, la protagonista de Baywatch volvió a dar cátedra de estilo con un vestido corto de silueta suelta y recta, cuello ligeramente alto, sin manga en un brazo y con una delicada capa en el otro. La pieza, en tono rosa bebé, la combinó con unas medias en el mismo color, que añadieron un toque juguetón y original al conjunto.
Para completar el look, Pamela eligió unos tacones altos en blanco, unas gafas estilo cat eye y, como ya es característico en ella desde hace un tiempo, un peinado simple y maquillaje casi imperceptible que enmarcaron su belleza natural. Sin duda, este ha sido uno de los looks más icónicos de su gira promocional, y una muestra más de que Pamela Anderson sigue siendo una musa de estilo… y quizás también, del amor.