Brad Pitt no solo se consolidó como uno de los hombres más atractivos de los años noventa, sino que, aparición tras aparición, demuestra que no teme experimentar con elementos estilísticos poco convencionales. Colores, patrones, combinaciones inesperadas: el actor no teme poner a prueba todo aquello que, en teoría, “no debería funcionar”.
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En fechas recientes, hemos visto mucho al protagonista de Fight Club, ya que desde el año pasado ha estado presente en casi todas las carreras del circuito de Fórmula 1, grabando junto a Damson Idrissu nueva película, una producción que acaba de estrenarse y que lo ha devuelto al centro de la conversación cultural.
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Entre los muchos diferenciadores que tiene Brad Pitt dentro del panorama hollywoodense, destaca su dominio de elementos que van más allá de la ropa. Nos referimos a accesorios como gorros de distintos estilos, lentes, bufandas y, por supuesto, su inconfundible melena. Brad ha dejado claro que la moda, más allá de ser algo rígido o serio, es una herramienta con la que se puede jugar, comunicar una idea o construir una narrativa visual propia.
A lo largo de los años, el actor ha tenido diferentes parejas y en los 90s se hizo de fama luego de hacer evidente que le gustaba coordinar con ellas. Más allá de los atuendos, Pitt muchas veces llegó hasta coordinar peinado con Gwyneth Paltrowy Jennifer Aniston.
El actor se hizo de fama en la década noventera luego de participar en películas como Siete años en el Tibet y Fight Club. Durante esta etapa, el actor tomó las giras promocionales de sus proyectos como una oportunidad para jugar con sus imagen y con ella sus atuendos.
A lo largo de los años, Pitt apostó por jugar con diferentes estilos de gafas, experimentando con marcos de diferentes tipos y formas, así como colores de lente. En esta ocasión, el actor apostó por un par de gafas deportivas de Oakley, mismas que ganaron popularidad luego de que el actor las usara en público en repetidas ocasiones.
Pitt ha sabido a lo largo de los años jugar con su imagen, utilizando su cabello como un accesorio más. Malabareando diferentes elementos como el largo y el color de su melena, sin miedo a incorporar elementos que caen dentro de lo que muchos podrían considerar "femenino".
Aunque la mayoría de los hombres apuestan por implementar gorras o "baseball hats" en sus atuendos. Pitt no duda en darle un giro distinto a este tipo de piezas y apostando por beanies o bucket hats de diferentes colores o estampados.
Pitt no teme caer en lo casual cuando se trata de eventos glamurosos. El mejor ejemplo fue su paso por Festival de Cine de Venecia, en el que apostó por intercambiar los clásicos zapatos formales y llevar un par de sambas.
El actor no teme incorporar color en sus atuendos, muchas veces combinando más de tres tonos diferentes con los que da dimensión y dinamismo a sus outfits.
El mejor ejemplo es esta ocasión en 2023 en la que combina una chaqueta de punto de múltiples tonos con un gorro de un color distinto.
A lo largo de los años lo hemos visto jugar con estampados que van desde líneas hasta cuadros. En febrero, el actor apostó por retomar el estampado tipo tie dye que dominó la década setentera.
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