Hora de brillar. Este otoño-invierno, la moda propone que las faldas de lentejuelas sean piezas insustituibles en nuestros armarios; y, además, que tampoco se haga distinción entre el día o la noche porque se llevarán para cualquier evento y en cualquier lugar. Esta arriesgada tendencia evoca el espíritu de los años 70, quizás la época en la que el sparkle era uno de los apartados del código de vestimenta femenino. Para los últimos meses del 2019, los diseñadores se decantan por las tipo lápiz o las que llegan justo a mitad del muslo salpicadas con destellos tornasolados que reflejarán toda la luz.

La mayor ventaja que tienen estas prendas es la facilidad de combinarlas con suéteres tejidos, camisas estructuradas, tops ceñidos, así como jackets y abrigos ligeros. Por esta razón, las influencers de las capitales más importantes del mundo se han apuntado a seguir el camino de las paillettes, renovando su estilo con looks resplandecientes.

Shine, shine, shine!

El brillo lo conseguirás por igual tanto si eliges los modelos cuajados en lentejuelas diminutas –como los que se vieron en la pasarela de Bottega Veneta en Milán–, o las de tamaño intermedio y con formas geométricas definidas que bordaron las faldas largas y de bajos asimétricos de Paco Rabanne. En ambos casos, la estética lady like cobra vida con estos clásicos de inspiración retro que, con el movimiento, producen un deleite visual.

Looks en capas

Nuevamente, el cambio de estación obliga a sumar texturas y a jugar con el layering . Y en este perenne ejercicio delante del espejo, las faldas de lentejuelas adquieren un protagonismo especial. Entre los diseños más llamativos –y que ya son objeto del deseo de muchas– están las metalizadas de Louis Vuitton y las midi de corte slouchy de Celine. Las botas altas, duster coats y los acentos en el cuello son necesarios para balancear los looks.

Faldas que marcan tendencia

Si quieres triunfar esta temporada, entonces debes sumarte a la moda luminosa como ya hemos visto en las runways de las firmas mainstream. La Liz Mini Skirt de NBD ($54), por ejemplo, tiene un vistoso patrón de cuadros en rojo, blanco y negro que también está en boga. Una midi como la X Revolve Evans Skirt de House of Harlow 1960 ($149) te hará el centro de atención, al unir lentejuelas mates y brillantes (Revolve).

Degradé de colores

Atrás quedaron los años en que las sequin skirts eran solo negras o nude. Para reforzar esta tendencia, las marcas han decidido ampliar la paleta cromática, fascinando con modelos con efecto ombré o con faldas tachonadas que intercalan matices intensos, los mismos que se apreciaron en el desfile de Elisabetta Franchi o en la semana de la moda de Tokyo.

Paillettes en todo momento

Estas placas radiantes cortadas a láser o de forma artesanal embellecen las faldas de líneas simples y las que incorporan aberturas, como la Sequin Midi Skirt de Topshop ($30) en vibrante color acqua. La Sequin Pencil Skirt de Zara ($89.90) conjuga apliques en blanco y plata, perfectos para armar atuendos sofisticados. Las prescriptoras de estilo celebran el regreso de las faldas de lentejuelas este otoño invierno ¡al igual que nosotros!