El Gran Premio de México 2025 no solo ha dejado momentos memorables dentro de la pista, sino también fuera de ella. Una de las grandes protagonistas del fin de semana en el Autódromo Hermanos Rodríguez ha sido Alexandra Saint Mleux, la novia del piloto monegasco Charles Leclerc, quien se robó todas las miradas al disfrutar del evento con un estilo impecable y un gesto muy especial hacia sus raíces mexicanas. Su presencia ha generado revuelo entre los asistentes y fanáticos de la Fórmula 1, consolidándola como una de las figuras más seguidas del paddock.
Nacida en Italia el 19 de junio de 2002, Alexandra Saint Mleux tiene 23 años y cuenta con raíces mexicanas por parte de su madre, lo que explica su conexión con el país. En una entrevista concedida a ESPN, Leclerc reveló: “Ella no nació aquí, pero su mamá es de Cancún, y obvio ha venido mucho a México desde su infancia… Su lengua materna es el español y se siente feliz de volver. La cultura mexicana es muy cercana a mí, por mi novia”. Las declaraciones del piloto de Ferrari despertaron simpatía entre los seguidores mexicanos, quienes celebraron la cercanía de la pareja con el país.
Conocida por su elegancia y discreción, Alexandra Saint Mleux ha sabido equilibrar su creciente exposición mediática con una vida personal auténtica. Sus seguidores la admiran por mantenerse alejada de la ostentación, pese a la fama internacional de su pareja. Además de ser reconocida como la novia de Leclerc, Alexandra ha construido una carrera sólida en el ámbito cultural y digital, destacando por su formación en historia del arte y su participación en proyectos de moda y contenido creativo, donde combina su sensibilidad artística con un gusto refinado.
El look de Alexandra para su visita a México
En el paddock del Gran Premio de México, Saint Mleux acaparó los reflectores al lucir un vestido blanco de inspiración boho, acompañado de una de las piezas más virales del año: la Maren Artificial Crystal Heart Shaped Bag de JW Pei, una mini bolsa en forma de corazón anatómico con acabado en cristal rojo y herrajes dorados. La pieza, valuada en 206 dólares, pertenece a la colección Maren de la firma JW Pei, reconocida por su diseño sustentable y estética escultórica. Su elección no solo fue un acierto de moda, sino también una declaración de estilo que combinó sofisticación y guiños culturales.
Durante el recorrido por el circuito, Charles Leclerc y Alexandra Saint Mleux fueron vistos paseando junto a su perro Leo Leclerc, protagonizando una de las escenas más comentadas del fin de semana. La joven influencer, con su carisma natural y su conexión con México, se ha consolidado como una figura admirada dentro y fuera del mundo del automovilismo. Su paso por el Gran Premio de México no solo reflejó glamour, sino también orgullo por sus raíces, dejando claro que su presencia aporta un toque de elegancia y autenticidad al universo de la Fórmula 1.








