Con el objetivo de compartir su testimonio con la audiencia del podcast La magia del caos, conducido por Aislinn Derbez, Esmeralda Pimentel abrió su corazón para hablar de los temas que pocas veces toca en las entrevistas. En esta plática entre amigas, la actriz echó un vistazo al pasado para recordar todas aquellas experiencias que han forjado a la mujer que es hoy. Entre las revelación que hizo, compartió por qué decidió retirarse los implantes de senos que se colocó en los 20, luego de graduarse del CEA, una época en la que admite que la falta de dirección también la orilló a caer en los excesos.
Por primera vez, Esmeralda se sinceró y compartió cómo vivió aquella etapa de su vida: "En algún momento tuve un encuentro con las drogas del cual me costó mucho salir, todo tenía qué ver con esta sensación de que lo puedes todo, de que tienes sensaciones que nunca habías tenido, también siento que estaba muy joven y sí costó un poco salir de ahí".
La actriz compartió un poco del contexto que enfrentaba en aquel momento y que contribuyó a esta situación: "Yo era una personas que estaba muy sola, vivía aquí en la Ciudad de México, muy sola, no tenía a mi familia, nunca tuve un guía, un mentor, un tutor que me dijera: 'No te vayas por ahí'. Yo misma fui abriéndome paso ante la vida, lastimándome un montón a partir del prueba y error".
A pesar de la adversidad, reconoce que todas las malas experiencias la ayudaron en su evolución: "Por otro lado lo agradezco, porque soy súper fuerte y gracias a eso soy la persona que soy y yo misma, ahora tengo mis ojos en otras personas diciéndoles: 'cuidado con esto'".
Cuando Aislinn le preguntó cuál creía que había sido su mayor error, en esta etapa que vivió, Esmeralda respondió: "Haberme puesto en peligro en muchas situaciones por no saber decir que no y hasta la fecha, cada vez que mi intuición me dice no es aquí, muévete, algo muy terrible pasa, me enfermo o se vuelve un caos, siento que viene una lección muy clara, contundente y dolorosa, cada vez que me traiciono".
A pesar de los peligros, Esmeralda también pudo conectar en aquella época con su intuición, que se convirtió en su brújula: "Por otro lado, siento que internamente, siempre he estado muy protegida, siempre he tenido mis ángeles y mis guías, siempre he tenido una consciencia de saberme proteger, parece contradictorio lo que estoy diciendo, pero siempre, aun en los momentos más peligrosos, una parte de mi consciencia siempre ha estado muy despierta y siempre ha habido una energía que me protege".
Ahora que el tiempo ha pasado y Esmeralda madura, se reconoce: "Yo hoy me siento muy orgullosa de mí. Siento que ha cambiado radicalmente, veo a esa Esmeralda poniendo primero los deseos de su pareja, desdibujándome para que el otro sea feliz y siento que eso ha ido cambiando gracias a la terapia y hoy siento que genuinamente estoy haciendo un ejercicio de honestidad absoluta y hoy entiendo que la honestidad es mi mejor escudo y regalo", finalizó.