Jennifer Lopez jamás imaginó que sería protagonista de un curioso momento este lunes que bien podría haber salido de una película. Y es que, en su reciente visita a Istinye Park en Estambul, Turquía, su deseo de entrar a una tienda Chanel se tornó en un comentado capítulo en el que hubo un gran malentendido.
La cantante de 56 años quería recorrer las tiendas en su tiempo libre previo al show que tenía planeado en el Yenikapi Festival Park. Pero se llevó una sorpresa cuando el guardia de la tienda le negó la entrada diciendo: "Estamos llenos".
Después de que Jennifer respondiera: "Ok, no hay problema", ella y su equipo, incluido personal de seguridad, se retiraron del lugar sin llamar la atención. Aquello no rompió con su idea de seguir de compras, pues se dirigió a Celine and Beymen, otra tienda cercana en donde se reporta que haría gastado miles de dólares.
Jennifer y el placer de decir que no
La situación pronto escaló a la gente de Chanel, en donde se dieron cuenta de que el guardia de seguridad no había reconocido a JLo, por lo que intentaron explicarle ese detalla a la cantante invitándola a pasar a la tienda, pero ella dijo que no.
JLo continuó con su camino, luciendo un conjunto rosado de short y camisa oversized con gafas a juego. La cantante podría haber tenido el tiempo contado antes de los preparativos para su show, o simplemente decidió rechazar la oferta de la forma más cordial posible.