A cinco meses del fallecimiento del conductor Daniel Bisogno, su hija Michaela, de 9 años, sigue honrando su memoria de una forma muy especial: a través del arte. El pasado fin de semana, la pequeña asistió a una audición en el Centro Cultural Teatro I, con la esperanza de formar parte de Matilda, el musical, producción de Alejandro Gou. Fue allí donde vivió un momento que la hizo sentir profundamente conectada con su papá.
Conmovida, Michaela relató a la prensa lo que ocurrió durante las pruebas: “De hecho pasó un colibrí… (sentí) muy padre”, compartió con una sonrisa a los medios de comunicación, como Ventaneando, que se dieron cita en el evento. Según explicó, el ave era roja y grande, justo el color favorito de su padre, lo que le dio un significado aún más especial. Aunque podría haber estado nerviosa, aseguró que no fue el caso, gracias a la preparación que ha tenido.
Este no es el primer gesto con el que la pequeña ha recordado con amor a su papá. Hace unas semana, durante su participación en un intercolegial de baile, la nenor reveló la forma en la que se hace acompañar de la memoria de su papá en momentos importantes de su vida. "Allá está mi chaleco y ahí traigo la loción de mi papá", dijo emocionada.
'Para mí es la hija perfecta': Christina Riva Palacio
Orgullosa, su madre Christina Riva Palacio acompañó a Michaela en la audición y no ocultó su emoción por todo lo que su hija ha logrado:
“Para mí es la hija perfecta. Le va increíble en clases, le va increíble en actuación y le echa ganas en todo”, expresó ante los medios. También agradeció el apoyo constante que han recibido desde la partida del conductor: “Ha sido impresionante. Siempre han estado pendientes de mi princesa”.
Sobre los rumores de conflictos familiares tras la muerte de Daniel, Christina fue clara y firme: “Todo está bien. La verdad, yo no veo nada de eso. Vamos para adelante. El amor es lo que tiene que salir adelante”.