Itatí Cantoral regresó a la emblemática casa de su padre, el maestro Roberto Cantoral, en Lindavista, la misma donde las notas de El Reloj -uno de sus boleros más icónicos- quedaron grabadas en la fachada como homenaje eterno a su legado. En compañía de su hermano, José Cantoral Zucchi, recorrió esta residencia en la que crearon entrañables recuerdos familiares, como el día en que la actriz se vistió de novia y recibió la bendición de su mamá, antes de llegar al altar con Eduardo Santamarina.
Al entrar a la residencia de Lindavista, Itatí no pudo evitar sumergirse en los recuerdos que la transportaron a su infancia. Recorrió cada habitación con una mezcla de nostalgia y cariño, evocando los años en que creció bajo el techo de uno de los compositores más importantes de nuestro país. La actriz también recordó que esta fue la casa donde vivió toda su niñez y de la que salió el día en que se casó.
Fue a través de su cuenta de Instagram, que Itatí compartió este emotivo clip en el que la vemos recordando los momentos más especiales junto a sus papás. Uno de los espacios que más la emocionó fue la cocina, donde su madre solía producir las grandes fiestas que se ofrecían a las que acudían las personalidades más destacadas del medios del espectáculo de aquel tiempo.
"Aquí mi mamá guardaba bajo llave todas las cosas deliciosas que comprábamos en el súper para cuando venía la gente importante, hasta caviares había aquí, champagnes, de todo tenía", recordó la actriz en su recorrido por los espacios que algunas habitó.
En esta visita, encontró un obsequió que le dio a su mamá en el Día de las madres, un cuatro, en forma de corazón, con un pensamiento dedicado a ella: "¡Mira, yo se lo regalé!", dijo. También mostró el espejo en el que se vio por primera vez vestida de novia: "Aquí mi mamá me besó cuando estaba vestida de novia... aquí", comentó nostálgica, mientras se miraba en el reflejo.
La actriz y su hermano realizaron esta emotiva visita en la víspera del concierto que ofrecerá José Cantoral en la Ciudad de México, en el que planea hacerle un homenaje al legado de su padre y en el que Itatí acudirá como invitada especial: "Acompáñenme a escuchar más anécdotas como está el 26 de junio en Noche no te vayas con José Cantoral en el Lunario", se lee en su feed.
La vida con Cantoral...
Hace unos años, durante una entrevista con Gustavo Adolfo Infante, para el programa El minuto que cambió mi destino, Itatí Cantoral recordó cómo fue crecer en una de las casa más originales de la Ciudad de México, de aquella época: "Mi papá era un hombre muy particular, desde la casa de Lindavista, donde están las notas para que puedas tocar El Reloj, pero por dentro es más particular, él siempre pensaba en hacer su casa como se la imaginaba, era un artista".
Itatí también confesó cómo fue ser la hija del gran Roberto Cantoral: "Escribía en todos lados, le agarraba la vena artística, todo el tiempo estaba escribiendo. En mi casa siempre se escuchaba el piano, por eso yo no puedo estar sin música, porque me recuerda a mi familia. Mi papá era muy bohemio y a mi casa iban todo tipo de personalidades por ejemplo Cantinflas, José José, Manzanero, Emmanuel".