Tras la fumata blanca para anunciar el nombramiento del nuevo Papa de la Iglesia Católica, se reveló el nombre del estadounidense Robert Francis Prevost, -también de nacionalidad peruana-, quien desde ahora será León XIV, como el elegido para estar al frente de esta nueva era en la institución religiosa. Con la llegada del primer Papa agustino, y el segundo Pontífice americano, se hicieron visibles las notables diferencias del atuendo eclesiástico del Santo Padre, alejado de la tradición del fallecido Papa Francisco, y más cercano a la costumbre de los atuendos papales como el de Benedicto XVI, de muceta color carmesí ornamentada en oro y sotana blanca.
El significado de la vestimenta del Sumo Pontífice
León XIV salió al balcón central de la Basílica de San Pedro desde donde saludó a los feligreses. El anuncio a la multitud lo dio el Cardenal Protodiácono Dominique Mamberti, quien destacó al Sucedor de San Pedro, elegido luego de varias horas de votación del cónclave. Previo a su presentación en público, el nuevo Papa se concentró en la llamada Sala de las Lágrimas, a la que se accede por una puerta ubicada junto al altar de la Capilla Sixtina, sitio en donde el cardenal elegido cambia su vestimenta, la cual está dotada de gran simbología.
Sotana blanca: esta simboliza la pureza, la humildad y el servicio, una prenda eclesiástica imprescindible de gran peso simbólico. Confeccionada con 33 botones para representar así la edad de Cristo y 5 sementales por las heridas de Jesús. La sotana también se complementa con una faja de seda muaré en color blanco.
Muceta: capa corta con abotonadura al frente, la cual cubre los hombros y la parte superior del pecho. Para esta ocasión histórica, León XIV llevó la prenda eclesiástica en color rojo, la cual Francisco, anterior Pontífice, usó en blanco. Esta pieza es utilizada en actos formales y no litúrgicos.
Estola: se trata de una banda larga que cuelga del cuello y cae de manera vertical por el pecho. Esta pieza de la indumentaria atrapada a la primera mirada por su llamativa confección. León XIV mostró una versión en terciopelo burdeos ornamentada con bordados de oro para simbolizar su oficio pastoral. La estola, esta vez rematada con flecos dorados, es usada por el Papa en su primera aparición y en actos litúrgicos de importancia.
Solideo: este es un casquete confeccionado en seda, color blanco, el cual es retirado por el Papa en actos litúrgicos, de ahí su nombre, el cual significa ‘solo Dios’.
Anillo del Pescador: la preciada joya representa al apóstol Pedro, quien fuera el primer Papa de la Iglesia Católica, llamado así por el oficio al que se dedicó antes de seguir a Jesús. Esta pieza es quizá la que más peso histórico tiene, utilizada también para sellar documentos oficiales. El anillo lleva grabada la imagen del apóstol lanzando las redes desde una barca y el nombre del nuevo Pontífice, el cual se graba en latín. La joya se destruye con la muerte del Papa y se elabora una nueva para su sucesor.
Roquete: para los actos litúrgicos, el Sumo Pontífice usa esta prenda corta de lino, la cual llega hasta las rodillas.
Cruz pectoral: es uno de los elementos fundamentales en la indumentaria papal, la cual cuelga del cuello con una cadena dorada. Esta pieza recuerda a su portador el llamado a seguir a Cristo, representando así el cargo y la dignidad. Esta puede ser de metal, madera o marfil.
Zapatos rojos: con la llegada de León XIV ha vuelto la imagen del Pontífice de zapatos rojos, a diferencia de Francisco, quien prefirió llevar calzado negro con la qiue buscó proyectar sencilles y discreción. El rojo simboliza la sangre de Pedro, primer Papa, así como de los mártires.
El toque de modernidad
La elección de los elementos de oro en el atuendo eclesiástico del Papa León XIV, ha sido un aspecto que ha atraído la atención. Sin embargo, uno de los accesorios que ganó visibilidad en el atuendo del nuevo Papa fue el uso de su reloj digital, el cual se percibe en una de sus muñecas, un tanto lejano al protocolo de las tradicionales vestimentas papales.