Cuando se trata de secretos de belleza, nadie lo hace mejor que las mujeres asiáticas. Desde Corea a Japón, es en Asia donde se han consolidado las mejores prácticas. El cuidado de la piel y el cabello, el maquillaje y técnicas rejuvenecedoras son solo algunas de las opciones que se les puede aprender. Pero si nos enfocamos en un país que lleva liderando la esfera de la belleza por mucho tiempo, Japón encabeza la lista.
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El país ha logrado recuperar más de una técnica ancestral para integrar en la rutina del día a día. Su especialidad son los beauty hacks para conseguir un cabello saludable, brillante y fuerte. No es de sorprender que sean precisamente las mujeres japonesas quienes poseen un cabello más que envidiable. Y si bien la genética juega un papel fundamental, los hábitos de belleza diaria son también un factor clave para conseguirlo. ¡Toma nota y aplícalos!
Así es la rutina de lavado capilar en Japón
Existen muchos mitos y creencias alrededor del cuidado del cabello. Desde personas que prefieren lavarlo a diario para asegurar una limpieza total, hasta aquellas que se inclinan por hacerlo cada tercer día para no quebrarlo, hay muchas formas de prestar atención a la melena. Sin embargo, en Japón no se enfocan tanto en la cantidad sino en la calidad del lavado. Porque sí, lavar el cabello también es un ritual.
El primer paso –que realmente es también el último– es aplicar la técnica del hair oiling. Tal como su nombre lo dice, esta estrategia se apoya de aceites para permitir que el lavado tenga los efectos correctos en el cuero cabelludo. Algunos aceites se ponen en la raíz antes del baño y algunos otros una vez que el pelo comience a secarse. Dos de los aceites más utilizados para esta finalidad son el aceite de camelia –utilizado antiguamente por las Geishas– y el aceite de salvado de arroz.
El siguiente punto esencial para el baño es incluir un masajeador. Para los japoneses, aprovechar al máximo el tiempo durante la ducha es primordial para conseguir esos objetivos deseados. Pero la sorpresa es que no utilizan un solo masajeador de cabello sino dos –uno por cada lado–. El secreto está en aplicar el shampoo y comenzar a masajear de la nuca hacia arriba unos minutos. No olvides, además, hacer este proceso con la llave cerrada para evitar desperdicio de agua.
Finalmente, el paso del secado es igual de importante para evitar frizz o pelo quebradizo. Las mujeres en Japón utilizan toallas de microfibra o playera de algodón para secar el cabello sin tallarlo con fuerza. Una vez que se haya absorbido la humedad, pueden proceder a utilizar un secador de cabello –poco tiempo y con poca intensidad–. Finalmente, cierran con un poco más de aceite.