Durante el año, muchas de las dudas de estilo que nos puedan asaltar se agolpan cuando llega el momento de pensar en un look de invitada. Para asistir a una boda o cualquier otra celebración que implica un código de vestuario elaborado, es importante evitar mezclas extravagantes, pero también distanciarse de los conjuntos sobrios que bien podrían formar parte de un estilismo de diario. Con el objetivo de construir apuestas seguras, se suele recurrir con frecuencia al vestido o mono, dos de los hits de estilo más repetidos en las bodas, sin importar la época del año. Para proporcionar un nuevo aire a las elecciones de siempre, proponemos nuevas alternativas de conjuntos dos piezas con las que ser la más elegante con un solo gesto. Además del traje, que se actualiza en variadas versiones, los looks de blusa y falda suman posiciones, igual que las mezclas de camisa y pantalón, dando lugar a vestuarios versátiles y personales. En la imagen, una instantánea de la última campaña de la marca española Vogana, donde aparecen dos trajes de inspiración retro de americana y pantalón, un valor seguro más allá de los meses de frío.