Septiembre y octubre son, sin duda, unos de los meses favoritos para celebrar una boda. El calor se suaviza, los días aún permiten celebraciones al aire libre y los looks de invitada alcanzan su mejor versión entre tejidos ligeros y tonos de otoño. Este fin de semana, las bodas de Natalia Palacios y Carliyo en Málaga y de Rocío Camacho en Madrid se han convertido en algunos de los escenarios más comentados, pero no han sido los únicos. Entre castillos históricos y enclaves de ensueño, hemos visto cómo las influencers reinterpretan el arte de vestirse para una boda: looks premamá, apuestas arriesgadas, guiños a la moda española e incluso invitadas que han coincidido con el mismo vestido, algo que siempre da de qué hablar.
La influencer de la generación Z deslumbró en la boda de Natalia Palacios con un diseño de Nicolás Montenegro en tono rosa salmón. De corte sirena y escote halter, remató el look con una coleta pulida que dejaba todo el protagonismo al vestido.
También en la boda de Natalia Palacios, la influencer eligió un impresionante vestido negro con pedrería de Nicolás Montenegro. Con espalda descubierta, tirantes y bordados florales, lo combinó con una melena suelta con ondas al agua.
Entre las más originales del fin de semana, esta microinfluencer marbellí optó por un vestido rosa de Baro Lucas con falda voluminosa. Lo acompañó de un sombrero de rafia, bolso dorado y sandalias marrones de tiras.
Una de las invitadas más estilosas del fin de semana. La influencer ha elegido un vestido de Blanche Vintage en color verde menta, una capa turquesa de Capaas Capicúa, una pamela XXL de Non standar y un bolso que ha pedido prestado a su madre.
En una boda campestre, eligió un vestido color teja de Posse, con diseño asimétrico, plisados y falda con volumen. Completó el look otoñal con un sombrero negro de Nana Golmar, bolso con forma de concha y joyas de Mumit.
Coincidieron con el mismo vestido de Hoss Intropia en tonos tierra. Aurora, embarazada, lo llevó con joyas XXL y bolso verde, mientras que Araceli apostó por un aire más minimalista con sandalias negras, joyas discretas y clutch marrón.
Siempre atrevida, apostó por un vestido largo de manga larga en tono rosa violáceo con estampado de Antik Batik. Lo combinó con un bolso redondo de madera personalizado de La Cerca y unas sandalias de rafia con detalles de margaritas de Castañer.
Recién estrenada en la maternidad, acudió a una boda con un elegante vestido midi color vino de Vogana. Un diseño de manga corta y falda con movimiento, que complementó con sandalias plateadas de cuña de Castañer.
Lució un vestido largo palabra de honor de Yerse, en tonos grisáceos con matices verdes. Con tejido rugoso y detalles fruncidos, lo combinó con blazer, sandalias negras de Jonak, joyas doradas de Mes Amies y clutch a juego de DeMellier.
En la boda de Rocío Camacho, brilló con un vestido burdeos de su propia firma. De corte midi y escote halter, lo combinó con complementos verdes y un clutch dorado, logrando un look muy otoñal y sofisticado.