Antes de que las firmas de lujo tuviesen embajadores de marca para promocionar sus productos, estaba Audrey Hepburn. Su estrecha relación con los grandes nombres de la moda desde los años 50, en especial con la casa Givenchy, la convirtió en referente de estilo y objeto de deseo para todas las mujeres y el resto de diseñadores. Es tal su repercusión que incluso siete décadas después del estreno de Desayuno con diamantes, una de sus películas más icónicas, la estela de la actriz perdura en los looks que hoy llevan las celebrities sobre la alfombra roja. La última en hacerlo fue Kaia Gerber, en el Festival de Venecia, y la razón detrás de este guiño es mucho más especial de lo que crees.
Kaia Gerber se transforma en Audrey Hepburn en el Festival de Venecia
Este lunes por la tarde, hizo su debut de alfombra roja con Lewis Pullman, su novio desde diciembre de 2024, cuya relación sucedió rápidamente a la ruptura de la modelo con el también actor Austin Butler, quien fue su pareja durante tres años. La hija de Cindy Crawford viajó hasta Venecia para apoyar a su nuevo chico, que protagoniza El Testamento de Ann Lee junto a Amanda Seyfried y, aunque ella no debía ser el foco de atención, el look que eligió para la premier sin duda consiguió que los fotógrafos se girasen a verla.
Kaia Gerber lució un vestido de encaje negro con lentejuelas de lirio del valle, de escote cuadrado con finos tirantes, cuerpo estructurado y una vaporosa falda, rematado con un cinturón de cuero negro. Una creación de Givenchy que nos regresa en el tiempo, concretamente a 1960, cuando el fundador de la casa de modas diseñó uno de los looks más memorables del cine: el vestido negro que, con solo dos minutos en pantalla, consiguió enamorar a millones de mujeres de todo el mundo, incluso medio siglo después.
Modificado por la diseñadora de vestuario Edith Head, quien alargó la falda original y eliminó una abertura que consideraba demasiado atrevida, el modelo original, confeccionado utilizando satén negro, se complementó en la película con salones de tacón bajo, guantes largos, un collar de perlas y gafas de sol redondas. Así se cimentó la imagen del glamour de aquella década que apenas comenzaba.
Sin guantes ni perlas, para evitar clichés, la modelo de 23 años hizo el debido homenaje a Audrey, y hay un motivo muy especial detrás de esta decisión, como adelantábamos hace unas líneas.
La historia de un icono con vestido negro
Al principio de su carrera, Hubert de Givenchy tuvo varias musas, pero cuando conoció a Audrey Hepburn, en el rodaje de Sabrina (1953), saltaron chispas. La actriz fue su inspiración máxima y apoyo más fiel durante más de 40 años, hasta el día de su muerte. Juntos, hicieron historia en la moda, pues Hepburn popularizó sus elegantes y estructurales diseños sobre la alfombra roja y a través de la gran pantalla, como es el caso de aquel icónico vestido negro de Desayuno con diamantes.
Si bien la protagonista de Vacaciones en Roma mostró también furor por el rosa y las gamas pasteles, fueron los tonos neutros los que reinaron en el guardarropa de fiesta de Audrey Hepburn a lo largo de su vida. El binomio blanco-negro fue su talismán de estilo, un dress code que es y será siempre sinónimo de elegancia y sobriedad, y este vestido, con el que posó frente a la vitrina de Tiffany & Co. en Nueva York, acabó siendo su mayor legado estético para las futuras generaciones.
Un nuevo éxito en su carrera de supermodelo: la razón detrás de este look de alfombra roja
Estas últimas tres décadas, Givenchy ha pasado por las manos de diferentes directores creativos, todos sumamente influyentes en la historia de la moda. John Galliano, Alexander McQueen, Riccardo Tisci, Clare Waight Keller, Matthew M. Williams y, actualmente, Sarah Burton, discípula y amiga íntima de McQueen. La diseñadora británica asumió el alto puesto este año y presentó su colección debut en la firma, para la temporada Otoño/Invierno 2025-2026, en un hôtel particulier de París el pasado mes de marzo.
Hace solo unos días se desveló que Kaia sería la imagen de campaña para esta colección. En el vídeo promocional, la modelo aparece vestida con las prendas que Burton ideó a partir de archivos de la primera colección de Hubert de Givenchy, mostrada al público en 1952. En cuanto a los estuches de maquillaje o la pedrería que recubren los looks, todo se trata de desechos olvidados en los almacenes de las oficinas de la casa francesa, reliquias que la actual directora creativa ha revitalizado para presentar una faceta renovada de Givenchy.