En otoño, la camisa blanca se llevará con vestidos negros (y parecerá que estrenas look cada día)

Las camisas y jerséis de cuello bobo, esas románticas propuestas que deben su nombre a la mezcla de estilo bohemio y burgués, fueron la primera pista vista en el Street Style previo paso por la pasarela del triunfo del armario lady. En otoño, las botas de combate tendrán una presencia llamativa en las calles sí, pero convivirán con creaciones mucho más delicadas. Las mezclas de inspiración preppy se desmarcarán de los vestidores clásicos para conquistar a todo tipo de chicas, algo que ya hemos visto en los perfiles de expertas en moda con formas de vestir muy diferentes entre sí. Dentro de esta estética formal, hay una fórmula de estilo que empieza a repetirse entre estilistas, editoras y modelos amantes de las novedades en materia de moda. La camisa blanca de líneas clásicas, combinada con un vestido tipo pichi negro, es el look de entretiempo con el que las expertas se rinden a esta tendencia. 

La consultora creativa Linda Tol, abanderada del nuevo minimalismo, hace suya la tendencia construyendo un conjunto lady con un minivestido negro de Prada (una de las prendas con mejor acogida entre las insiders) y una camisa que, además, refleja cierta estética collegue gracias a las bailarinas que se combinan con unos calcetines blancos altos, un gesto de tendencia que venimos viendo desde el verano y que también se adaptará a la nueva temporada, como ha demostrado la top Bella Hadid en sus últimos looks. Otra de las influencers de moda más seguida en la esfera digital, Caroline Daur, ha apostado también por el mix blanco y negro con un conjunto muy similar. En su caso, apostó por un sencillo vestido negro de cuero y una maxicamisa blanca de cuello rígido con solapas terminadas en pico. Un look cómodo, sencillo, atemporal, integrado por dos básicos especiales y sin embargo, diferente. 

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No hay tendencia que se resista a la top sueca Elsa Hosk, quien también ha publicado algunos looks echando mano a este tipo de propuestas. En su caso, fiel a su estilo ecléctico con presencia de diseños informales, cambia la camisa blanca clásica por un diseño básico de manga corta, y lo combina con el ubicuo vestido de Prada negro. Como toque final, unas zapatillas tipo dad shoes y calcetines blancos altos, el accesorio inesperado de 2020. Esta mezcla bicolor, en función de los complementos con que se culmine, puede actualizar el estilo lady tal y como lo conocemos y crear estilismos desenfadados o, por otro lado, redefinir la silueta working dando una nueva vida a la camisa mas versátil de cualquier vestidor. 

En Zara, la camisa blanca también se luce bajo vestidos negros, en su caso con una propuesta muy sofisticada. Un diseño blanco de volantes con lazada al cuello, encaja a la perfección con el little black dress más favorecedor: una creación de escote corazón que se ciñe debajo del pecho y se remata con una hilera de botones joya. El layering más práctico, tanto para alargar el uso de los vestidos de verano al añadir prendas de manga larga, como para desmarcarse del uniforme oficial del otoño, y olvidar, por un momento, los vaqueros y jerséis de punto.