¿De verdad ha convertido Meghan Markle su falda plisada en un minivestido?

El último look de la Duquesa ha revolucionado las redes ante la idea de este inesperado truco

Por Paula Callejo

Los duques de Sussex finalizan hoy su viaje oficial a Marruecos después de dos intensas jornadas de visitas a diferentes enclaves del país africano. A primera hora de la mañana, el matrimonio acudía a conocer un centro ecuestre con motivo de un programa organizado para ayudar a los niños con necesidades especiales, donde Meghan Markle ha lucido un conjunto totalmente cómodo y apropiado para la situación. De esta manera, ha vuelto a apostar por sus infalibles pantalones vaqueros premamá, sumados a un jersey de punto a rayas y una cazadora tipo cargo en verde militar, siguiendo la combinación preferida de su cuñada Kate Middleton. Sin embargo, apenas unas horas después ha cambiado radicalmente de look y ha estrenado un curioso diseño que ha confundido en redes sociales.

La Duquesa ha dejado a un lado los zapatos planos y las prendas de punto para recuperar su faceta más sofisticada en su paseo por unos famosos jardines de Rabat, aunque ha sorprendido al evitar marcar sus curvas premamá, algo que suele ser habitual en sus estilismos. Se ha decantado por el infalible tándem del blanco y negro al recuperar su chaqueta tipo blazer blanca de la firma Aritzia valorada en 150 libras (unos 172 euros aproximadamente), que ha lucido sobre un nuevo vestido que no ha tardado en generar numerosos comentarios en redes sociales. Este diseño plisado, con escote palabra de honor, silueta evasé y bajo asimétrico, ha confundido a los seguidores de la esposa del príncipe Harry por su similitud con una falda.

Los usuarios de Twitter e Instagram han destacado que esta pieza se parece bastante a las piezas midi plisadas que han enamorado recientemente a doña Letizia, Rania de Jordania o la propia Meghan Markle, por lo que no descartan que se trate de una de estas faldas reconvertida en vestido al subir la parte de la cintura al escote. Hay quien se ha atrevido a afirmar que podría tratarse de la que lució el pasado 31 de enero durante una visita a la Universidad de Londres. En aquella ocasión, optó por un conjunto monocolor que no pudimos ver a la perfección ya que llevaba sobre él un abrigo de Givenchy que evitaba apreciar los detalles, pero sí que pudo intuirse que Meghan llevaba una falda estilo bailarina de la misma firma bajo un top de punto que entallaba su tripita.

Sea cierta o no esta teoría, la realidad es que el resultado que consigue la Duquesa es impecable y a su vez original. Ella ha completado el estilismo con unos inusuales maxipendientes circulares dorados de la marca Gas Bijoux, que cobraban un protagonismo especial gracias a la coleta tirante con raya en medio mediante la cual recogía su característica melena oscura. Destacan también los zapatos, unos salones destalonados negros decorados con plumeti, pertenecientes a la marca Manolo Blahnik.

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