Alerta Fashion: terciopelo, cuero o satén, Tom Ford elige los tejidos del nuevo traje

El diseñador juega con los materiales para reinventar este básico durante la Semana de la Moda de Nueva York

Por Regina Navarro

Decía Yves Saint Laurent que "la elegancia consiste en olvidarse de lo que uno lleva". Tal vez por eso, el diseñador francés trató de revolucionar el armario femenino al incorporar nuevas siluetas con las que ampliaba el horizonte de la moda y aportaba comodidad a unos estilismos que, hasta entonces, no lo eran tanto. Entre sus apuestas más señaladas el traje, una pieza convertida, a día de hoy, en un básico. Por eso no sorprende que sean muchos los creadores que lo reinventan una y otra vez hasta dar con nuevas fórmulas. Uno de ellos ha sido Tom Ford, que ha apostado por combinar blazer y pantalones de diferentes tejidos para dar un aire renovado a las propuestas más clásicas.

Uno de los meses más intensos para la moda, además de septiembre, comienza con la Semana de la Moda de Nueva York, un evento que atrae la atención de expertos, influencers y amantes del sector que quieren conocer las nuevas tendencias antes que nadie. En medio de lo que será una vorágine de desfiles, propuestas con más o menos riesgo e innovación, Tom Ford desafía a la crítica con una colección sin grandes estridencias, en las que la silueta masculina se reinterpreta una y otra vez. El resultado son trajes de chaqueta, pantalones con camisas ligeramente ablusadas, gabardinas y sí, algún que otro vestido de líneas puras. Quizá lo más llamativo es su modo de jugar con los tejidos y de crear el nuevo traje del próximo otoño.

El terciopelo se convierte en el material preferido del diseñador que, en su colección Fall 2019, utiliza para vestir a hombres y mujeres: a ellos con conjuntos completos, a ellas en piezas clave. Así, los trajes femeninos se componen de americanas elaboradas con este acabado que imprime ciertas dosis de sofisticación y elegancia. Los pantalones, sin embargo, se confeccionan en satén, un tejido con acabado brillante, o vinilo. Para las menos atrevidas o más sobrias también hay opciones: el terciopelo se sustituye por materiales más ligeros que alivian el peso del estilismo. El cuero también está presente en las americanas, dando lugar a combinaciones más arriesgadas, pero igualmente favorecedoras.

Las tonalidades llamativas y las siluetas oversize habían protagonizado hasta hace unos meses este tipo de prendas. El diseñador propone sustituir los rosas, malvas o naranjas por rojos, caqui, azul noche o negros. Ciñe ligeramente las americanas, para potenciar la cintura, pero los pantalones se mantienen ligeramente despegados. Eso sí, prefiere cortarlos por encima del tobillo y adornarlos con una doble vuelta. Aunque con estas combinaciones Tom Ford resta sobriedad a las prendas, también juega con las mezclas tonales –marrón arriba, caqui abajo– para aquellas que quieran beneficiarse de ambas prendas pero prefieran huir del traje.  

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