El motivo por el que Rihanna ha rechazado actuar en la próxima Super Bowl

Junto con el concierto de este año en Coachella, una de las actuaciones más memorables de Beyoncé fue la que tuvo lugar en el intermedio de la Super Bowl de 2013, con sorpesa de las Destiny's Child incluida y a la que seguiría su igualmente aclamado show de 2016. La de Justin Timberlake y Janet Jackson también forma ya parte de la cultura popular, aunque no tanto por las canciones interpretadas. El descanso de esta cita deportiva, que congregó una audiencia de más de 103 millones de personas este 2018, según datos de Nielsen, es uno de los espacios comerciales más codiciados de la televisión estadounidense y la actuación que divide el partido una de las más esperadas del año. Lady Gaga, Madonna, Prince, Cold Play, Katy Perry... los artistas más seguidos de cada generación han encontrado en este encuentro la oportunidad perfecta para sumar un éxito más a su carrera musical. Pero este año, Rihanna ha rechazado participar, según publica Us Weekly, eligiendo finalmente la organización a Maroon 5.

"La NFL y Fox querían que fuera Rihanna quien actuara en el intermedio en Atlanta. Se lo ofrecieron a ella pero lo rechazó a raíz de la polémica del jugador que se arrodilló ante el himno, no está de acuerdo con las políticas de la NFL y apoya a Colin Kaepernick", publica el portal Us Magazine, citando a una fuente cercana. La controversia a la que se hace referencia se remonta a finales de 2016, cuando el jugador de fútbol americano Colin Kaepernick se arrodilló al sonar el himno de Estados Unidos como protesta a la violencia policial contra las personas negras y en apoyo al movimiento Black Lives Matter. Su gesto fue seguido por algunos compañeros de profesión y se ha convertido en un símbolo que ha llamado la atención de marcas como Nike, que no ha dudado en fichar al deportista en su última campaña, donde aparece fotografiado en blanco y negro en primer plano junto al lema Believe in something. Even if it means sacrificing everything (Cree en algo. Incluso si eso significa sacrificarlo todo).

Un eslogan que bien se podría aplicar a la decisión de Rihanna, que ha elegido dejar pasar la oportunidad de protagonizar el halftime de la Super Bowl, un reto al que todavía no ha hecho frente en sus años como cantante, para apoyar una causa que defiende con vehemencia. En 2010 participó junto con Justin Bieber en un concierto celebrado en los días previos al partido, pero para verla sobre el escenario del encuentro promovido por la NFL parece que habrá que esperar. Otros artistas como Cardi B podrían haber rechazado también participar en el intermedio por la misma razón, tal y como publicó TMZ hace unos meses.