El 'ABC' de los polvos bronceadores: cómo imitar el tono del verano de forma (muy) creíble

El buen tiempo ha comenzado y, aunque ya puedas disfrutar del sol sentada en una terraza, posiblemente te queden algunas semanas para poder tumbarte en la playa o en la piscina. La buena noticia es que no vas a tener que esperar tanto para tener el efecto del sol sobre la piel: los polvos bronceadores se van a convertir en tu varita mágica para que parezca que estás de vacaciones… aunque todavía te queden meses para disfrutarlas. Eliecer Prince, make up artist de Guerlain, y María Espada, formadora de make up y piel de La Biosthétique, te cuentan el paso a paso del maquillaje que tienes que conocer para conseguir en tu cara un toque de color natural con el que darle la bienvenida al verano.

1. Elegir la brocha correcta

Aunque parezca un detalle sin importancia, la brocha que utilizas para aplicar el maquillaje es fundamental, Eliecer Prince recomienda las Kabuki: “De pelo natural y sin punta, planas en la superficie. La forma, densidad y diseño de cada brocha Kabuki permite aplicar cantidades concentradas de maquillaje, creando cobertura con aspecto muy natural”. María Espada añade que si vas a utilizar un producto en crema, elige mejor el pelo sintético: “Absorben menos cantidad de producto y por tanto no se desperdicia”.

2. Siempre un tono natural

“Hay que evitar los maquillajes que oxiden (que tiren a naranja), lo que nos proporcionaría un efecto "máscara" en la piel”, aconseja la experta de La Biosthétique, como la base Teint Naturel de esta firma, disponible en 6 tonos con matices rosados o nude, pero nunca naranjas. Prince apunta que siempre es mejor quedarse corta que pasarse: “Es preferible realizar varias pasadas del polvo bronceador en nuestro tono que utilizar uno más oscuro porque el resultado será poco natural”. Una elección segura son los polvos de sol Terracota Light de Guerlain, disponibles en 6 tonos entre los que encontrar la intensidad perfecta para ti.

3. El subtono también es importante

“Si eres de las que no logran conseguir un tono moreno en verano porque tiendes a ponerte roja, eres fría. A personas con subtonos fríos les favorecen los maquillajes con pigmentación rosada”, explica Eliecer sobre la elección del matiz de los polvos bronceadores, y apunta: “De lo contrario, si al tomar el sol consigues un buen bronceado moreno, eres cálida. A las personas con subtonos cálidos les favorecen los maquillajes con pigmentación más amarilla, los tonos dorados”.

4. Dónde hay que aplicar el polvo

Para empezar, antes que nada María Espada avisa: “Para personas a las que les guste utilizar sólo los polvos sin base de maquillaje, es muy importante tener una tez tratada e hidratada ya que, de lo contrario, nos podría dar un aspecto de "piel reseca" y se marcarían mucho más las imperfecciones que tengamos”. Eliecer Prince continua: “Deben aplicarse en la frente, las mejillas, la nariz, la barbilla y el cuello. Y siempre darse con una buena brocha, retirando antes el exceso de producto”.

5. Los peores errores que puedes cometer

Para María Espada, el error podría estar antes de comenzar a aplicar los polvos de sol: “Una piel poco tratada e hidratada daría lugar a que el pigmento sea menos o más absorbido en ciertas zonas, lo que provocaría un tono irregular y poco duradero”. Por eso ella aconsejar aplicar siempre una crema hidratante como paso previo al maquillaje. Para Elicer, “los errores más típicos suelen ser el comprar dos tonos más que el color de tu tez y la mala aplicación del producto”, afirma el experto de Guerlain. Además, si se va a utilizar como único producto para la cara, “lo más importante es aplicarlo de fuera hacia adentro para que la zona céntrica no se oscurezca y luzca natural”.