¿Y si con este desayuno quemaras grasa durante todo el día?

Según la ciencia, así es como debería ser la primera comida del día para impulsar tu metabolismo durante las 24 horas siguientes

Por Mariana Chacón

Existen muchos trucos con los que mantenerse en el peso ideal sin seguir una estricta dieta. Por ejemplo, tomar una de las especias más típicas de la Navidad, canela, para quema más calorías; preparar palomitas en aire caliente como snack saludable; o evitar los errores típicos al elaborar una ensalada. Recientemente se ha publicado un estudio en The Journal of Nutrition que añade otro tip más para lograr tu objetivo desde primera hora del día: tomar el desayuno ideal. Gracias a la investigación de los expertos de la Universidad de Alabama, se ha descubierto cómo es el porcentaje más equilibrado de nutrientes en el plato matutino perfecto.

El sorprendente descubrimiento que han hecho con este estudio es que las grasas serían tus mayores aliadas para quemar grasa a lo largo del día. Los investigadores estudiaron a dos grupos de personas. Las primeras tomaban un desayuno en el que el 35% eran carbohidratos, el 20% proteínas y el 45% grasas; es decir, casi la mitad del plato estaba compuesto por este último grupo de nutrientes. El segundo grupo consumía un desayuno más rico en hidratos, formado por un 60% de estos, un 20% de proteínas y otro 20 de grasas.

La evidencia que demostraron los científicos es que el primer grupo de personas, aquellos que tomaron un desayuno rico en grasas, conseguían (irónicamente) una mayor oxidación de las grasas durante las 24 horas siguientes. Este proceso de oxidación es fundamental para quemar calorías y perder peso. Además de esto, también descubrieron que en las del segundo grupo se producía el efecto contrario: la oxidación se reducía y, por lo tanto, incrementaban el riesgo de engordar. 

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

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Eso sí, los resultados de este estudio no se traducen en una barra libre mañanera de mantequilla y comidas fritas porque las grasas que deben formar el 45% de tu plato son las conocidas como ‘grasas buenas’, presentes en el aguacate, los huevos o los frutos secos. Puedes completar el plato con un 35% de hidratos de carbono de grano integral para aprovecharte de su alto contenido en fibra, un componente que ayuda a mantenerte saciada durante más tiempo, un beneficio que se traduce en perder peso sin pasar hambre.

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